¿Quieres despedir a tu mascota? Puedes hacerlo en el nuevo canal de EL COMERCIO
Imagen de archivo de la vega del Arcenorio, en la zona alta de Ponga. N. A.
Incendios forestales en Asturias

Pastores y bomberos, héroes en el Arcenorio

La alcaldesa de Ponga, Marta Alonso, destaca que «en esta zona sospechamos que la causa de los incendios ha sido la tormenta eléctrica. Con ganado arriba -en las majadas-, nadie en su sano juicio se atreve a prender fuego, y los pastores están teniendo un comportamiento ejemplar, luchando contra el incendio desde el domingo»

Octavio Villa

Gijón

Martes, 19 de agosto 2025, 12:25

Cuando el monte prende es últimamente habitual señalar como posibles causantes del fuego a los profesionales del campo, presuntamente con la intención de limpiar ... de maleza el monte o, peor aún, de cobrar ayudas o facilitar usos urbanísticos.

Publicidad

Esta criminalización responde a una generalización por una parte de lo que en la zona rural se sabe bien que no es lo habitual; también a un posicionamiento absoluto contra el uso del fuego en las labores agroganaderas, cuando éste ha sido históricamente un recurso bien utilizado por los profesionales del campo, y en no menor medida, por la simplificación de los mensajes. Por ello, es especialmente notable el ejemplo de los pastores de la zona de la vega del Arcenorio, en la zona sur de Ponga, que «están teniendo un comportamiento ejemplar, luchando contra el fuego desde el domingo sin casi dormir y quedándose por la noche allí», en esa majada en la que su ganado pasta en verano. Quien lo relata es la alcaldesa de Ponga, la socialista Marta Alonso, que también está teniendo días complicados, como la mayoría de los alcaldes de la cordillera, y que en un momento que se toma para recuperar el resuello habla con EL COMERCIO.

Marta Alonso no sólo es alcaldesa. Es quesera, es ganadera a pequeña escala, y entiende bien cómo funcionan sus compañeros ganaderos. Su concejo es grande en extensión, pequeño en población y muy envejecido, y a estas alturas, moderado en ganadería.

Mantener los bosques limpios de maleza se antoja una tarea más que titánica con los recursos disponibles. Imposible, directamente. Con todo, la alcaldesa defiende el buen sentido en la actuación de los ganaderos: «con el ganado arriba en las majadas -en los pastos de verano- nadie en su sano juicio se atreve a prender fuego», explica, a la vez que anota que «se sospecha que los incendios de Arcenorio, Taranes y Valle del Moru los inició la tormenta eléctrica que hemos tenido, así que son derivados de un infortunio».

Publicidad

La propia alcaldesa pasó el domingo una jornada durísima. «Me avisaron del fuego de Taranes, que se inició tras la peña y subió hasta la copa y bajaba hacia el pueblo. La brigada de bomberos y la cooperativa estaban allí subiendo a pie cuando llegué, y cuando vi que evitaban que llegase el fuego al pueblo fue cuando me avisaron de que había fuego en el Arcenorio. Subí con un guarda forestal y cuando llegué estaban allí otro guarda y todos los ganaderos de la zona vigilando y controlando el fuego. Varios de ellos llevan días durmiendo allí, en una zona de pradería que por arriba linda con Ponga».

Y si los ganaderos y pastores pierden el sueño es para evitar que las llamas «lleguen a la reserva de Llué o a la zona de Peloño y Tolivia, lo que sería un desastre total».

Además, mala cobertura

«¿Y sabe si ha llegado el fuego a esa zona, señora alcaldesa?» «Pues mire, no, porque tenemos muy mala cobertura, o ninguna cobertura, en esa zona», responde Marta Alonso, dejando claro el inconveniente que supone la falta de servicio de telefonía móvil en montaña. «Sé que el helicóptero del SEPA ha estado actuando en Taranes y en el Valle del Moru y que iba a ir al Arcenorio. Nosotros hemos cerrado la piscina al público para que pueda coger agua si no puede en la balsa de Excueñu», relata Marta Alonso, que no tiene más que elogios «para los bomberos que estaban en Taranes, que cuando acabaron allí subieron al Arcenorio a ayudar a los pastores y ganaderos que luchaban contra el fuego en la zona, y también se quedaron de noche».

Publicidad

Y desde la experiencia de otras ocasiones, la alcaldesa avisa: «ahora hay que tener claro que la maleza que se quemó sujetaba piedras y tierra, así que ahora hay peligro de derrumbes». Esto no acaba.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

1 año por solo 16€

Publicidad