Lo que dice el autor del polémico informe sobre la oficialidad

¿Cuál fue su planteamiento? Primero, lo puramente jurídico, es decir, resolver si se puede reformar el Estatuto. Concluyeron que sí y pasaron a valorar cómo a partir de «diferentes posibilidades de articularlo», apuntó el profesor, que confirma que el equipo «no recibió ninguna indicación política» durante el proceso porque, de haber sido así, «no hubiésemos aceptado». El coste de su trabajo, entregado en diciembre de 2020, rondó los 17.000 euros tras sumar el IVA. «Nosotros participamos a través de la Fundación de la Universidad Oviedo, la cual se queda con una parte. En términos netos, cobré 2.086,87 por mi participación», concretó Presno Linera, que este viernes ofreció la conferencia 'El sistema electoral asturiano' como parte de las jornadas '40 años de autonomía', que organiza la Asamblea de Derecho.

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En ella apuntó algunos elementos «para mejorar» un sistema «casi preconstitucional». Enumeró la cuestión del voto de asturianos en el extranjero, simplificar las circunscripciones y el desbloqueo de las listas. Opina que «la reforma estatutaria tendría que tener otros contenidos», como debatir la figura del Decreto-Ley o la necesidad de convocar elecciones en las mismas condiciones que las comunidades históricas, es decir, no sujetas a la convocatoria nacional.

Pero la oficialidad a raíz de su estudio marca la actualidad. En él, dicho de otro modo, el equipo no se ocupó solo de la reforma estatutaria, también de la «necesaria y desde luego previsible» ley posterior que lo desarrollase. Y en esta es en la que habría distintas posibilidades que son, junto a la ocultación del documento, las que han caldeado el ambiente político. «Se dejan abiertas cuestiones porque a nosotros no nos corresponde decir cómo se tiene que hacer», defiende el catedrático, que tiene claro cuál sería el escenario menos realista: «Pensar que de la noche a la mañana se podría introducir por vía legal un modelo muy avanzado generaría frustración porque faltarían medios personales y materiales para hacerlo viable». Para él, el escenario de los 18 millones sería «el más lógico».

Presno Linera no quiere que se confunda coste con impacto económico. «El coste real de hacer oficial el asturiano no se sabe porque depende de cómo se hiciese, y se tendría que valorar que además de gasto público habría inversión privada. El impacto que recogemos es, además, especulativo», explica, porque «no es lo mismo decidir que la llingua sea obligatoria en el colegio solo en una asignatura propia a que se impartan también otras materias y no es lo mismo que las decisiones se implanten gradualmente que de manera acelerada».

Y no comparte la decisión de no hacer el informe público antes: «Cuando lo entregamos, nos ofrecimos a comparecer. A nosotros nos hubiera gustado que se hubiera publicado, pero no era cuestión nuestra. Yo, y lo defendido muchas veces, creo que la transparencia debe de ser la regla, y en este caso me la aplicaría a mi mismo», zanja, y sobre todo lamenta que el documento se esté utilizando como instrumento político sin entrar a valorar la calidad académica del trabajo.