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Multa de 4.200 euros por poner una denuncia falsa contra dos agentes de la Policía Local

Tras ser multado por aparcar en zona de carga, les acusó de haber levantado un atestado falso cuando un año atrás su padre fue atropellado

José Fernando Galán

Miércoles, 21 de mayo 2014, 13:18

No le ha salido gratis a un vecino de Las Vegas interponer una denuncia falsa contra dos agentes de la Policía Local de Corvera. El juez le ha impuesto una multa de 4.200 euros y le obliga a indemnizar con 250 a cada agente por los daños morales ocasionados.

Según recoge la sentencia, dictada en segunda instancia por el Juzgado lo Penal de Avilés, todo comenzó por una multa por aparcamiento indebido. Días después el infractor, L. A. M. S, alegó ante el Ayuntamiento que dos agentes habían falseado el atestado y la declaración que realizaron cuando, un año atrás, su padre había sufrido un atropello que le produjo heridas que precisaron hospitalización.

La conclusión del informe redactado aquel día por los dos agentes es que el atropello no se produjo en un paso de peatones y que el coche circulaba a escasa velocidad, y así lo declararon en el juicio. Las pretensiones del atropellado, quien aseguraba que el coche le había golpeado cuando cruzaba un paso de peatones, fueron desestimadas, si bien a raíz del recurso el juez condenó a la compañía aseguradora a pagarle una indemnización en base a unos nuevos testigos, «sin que en esta sentencia se hubiera oído a los agentes en cuestión ni se pusiera en tela de juicio los datos recogidos en el atestado», recoge la sentencia.

En sus denuncia, L. A. M. S. manifestó que el atestado del accidente de su padre «no estaba correcto ni completo», lo calificó de «falso» y concluyó que como consecuencia «se le declaró culpable de ser atropellado». También señaló que los agentes habían «falseado» su declaración hasta el punto de poner en su boca que había dicho, «pese a que estaba inconsciente, que el conductor no tenía la culpa, que venía despacio y que había sido atropellado fuera del paso de peatones, cuando una testigo decía lo contrario y las propias fotos de la policía también».

A raíz de la denuncia el Ayuntamiento abrió una investigación. Ambos agentes tuvieron que rendir cuentas ante el alcalde, el jefe de Policía y el concejal de Seguridad, y la conclusión fue que el atestado era correcto. Con todo, los agentes fueron llamados a declarar ante el Juzgado de Avilés Número 6, aunque finalmente solo lo hizo uno de ellos. Dijo que la situación le había generado «perjuicios profesionales», ya que fueron cuestionados antes sus superiores y por el resto de compañeros, y que el suceso «tuvo trascendencia pública». También dijo que llegaron a temer por su puesto de trabajo.

El juez resuelve que la intención del denunciante era «perjudicar a los agentes a raíz de un expediente sancionador incoado con ocasión de una infracción de tráfico» y le declara «autor responsable de un delito de acusación y denuncia falsa». La pena, 14 meses de multa a razón de 10 euros de cuota diaria y una indemnización de 250 euros a cada agente en concepto de responsabilidad civil «por los daños morales sufridos». También tendrá que soportar las costas del juicio.

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