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PEPE G.-PUMARINO
CANDÁS.
Lunes, 9 de diciembre 2019, 00:40
El Ayuntamiento de Carreño depurará responsabilidades una vez finalicen los trabajos que se están realizando en las inmediaciones de la urbanización privada de Xivares, destinados a estabilizar el terreno donde se produjo el argayo el pasado 23 de noviembre. Esta medida se ha tomado después de verificar que la finca afectada no es de titularidad pública y dado que las obras han tenido un coste cercano a los 40.000 euros, ahora con cargo al Consistorio.
Así lo explicó la alcaldesa de Carreño, la socialista Amelia Fernández, tras recibir el informe técnico emitido por el arquitecto municipal. En el mismo se recoge que para poder afrontar una reparación definitiva de la senda del Tranqueru y de los daños que este argayo ha causado sobre las instalaciones deportivas de la urbanización 'Playa de Xivares', «habrá que determinar previamente la titularidad de la misma, ya que no consta que ese tramo de la Senda Norte se encuentre incluido en el inventario municipal. Por tanto, la actuación excedería inicialmente de las obligaciones de mantenimiento de la infraestructura a las que pudiera estar comprometido este Ayuntamiento».
La alcaldesa se comprometió a mantener una reunión de trabajo y coordinación con la comunidad de propietarios de la Urbanización. «Y en cualquier caso, teniendo en cuenta los repetidos episodios de inestabilidad que vienen teniendo lugar sobre diferentes elementos de este tramo de la Senda Norte (túneles, taludes, muros y visera), consideramos indispensable la elaboración de un proyecto técnico en el que, previo diagnóstico de la situación en toda la infraestructura, se prioricen y diseñen las actuaciones a ejecutar que resulten necesarias para poder garantizar la seguridad de la vía». Igualmente, añadió, «creemos necesario que el proyecto técnico defina las operaciones de mantenimiento preventivo a realizar en el futuro sobre los diferentes elementos de la Senda del Tranqueru y establezca la intensidad y frecuencia recomendables para ellas».
Al producirse el argayu el pasado día 23 de noviembre, el Consistorio tramitó de emergencia unas actuaciones conformes a lo previsto en la Ley de Contratos del Sector Público. Éstas consistieron en la ejecución en la parte superior del talud de una entibación o pantalla a base de una hinca de raíles empotrados en el terreno en vertical para permitir la colocación de chapas de acero en su parte interior para sostenimiento del talud. El coste de esta actuación de emergencia se estima inicialmente en 40.000,00 euros (IVA incluido), según el avance de presupuesto facilitado por la empresa Posada Organización, S. A. Un desembolso que fue considerado adecuado por parte de la Oficina Técnica Municipal para la ejecución de las obras de emergencia descritas a la mayor brevedad.
En palabras de Amelia Fernández, «desde la puesta en conocimiento de lo sucedido los técnicos municipales trabajaron en dar la mejor solución a la situación generada por las inclemencias del tiempo». Así, momentos después del argayo, la primera acción que se tomó ante la evidente peligrosidad fue delimitar la zona mediante un vallado para evitar el tránsito por la senda.
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