La propiedad negó la existencia de riesgos sobre la vía pública
Miércoles, 22 de enero 2020, 00:15
«Las distintas edificaciones que la empresa Albo posee en Candás no corren riego alguno de desprendimientos». Esta fue la contestación de los propietarios de la fábrica dieron en noviembre de 2017, cuando argumentaron que los mencionados inmuebles «habían superado las inspecciones técnicas hacía menos de un mes». Desde entonces, es notable el deterioro del patrimonio empresarial a pesar de que en 2016 los herederos de la firma conservera crearon una empresa inmobiliaria para negociar el futuro de sus edificios.