«Solicitaremos el traslado de la cabecera del colegio de Ceceda a Santolaya»

En un municipio que ha incrementado en un 10% el número de vecinos en los últimos años, los proyectos para fijar población, como disponer de una escuela de 0 a 3 años o ampliar el vivero de empresas, se convierten en fundamentales. Esas son las principales líneas de trabajo del Ayuntamiento de Cabranes, encabezado desde 2014 por Gerardo Fabián (Torazo, 1980).

-¿Cómo se está viviendo la pandemia en Cabranes?

-Se vive con cercanía, con colaboración y con muchísima empatía, ya que además, precisamente por nuestra dimensión, podemos realizar un seguimiento continuo de los vecinos. Por otro lado, sabemos que con tan solo siete casos nos situaríamos en este momento por encima de la tasa de Asturias, lo que nos hace estar siempre alerta. Afortunadamente solo hubo 10 casos a lo largo de todo el período y actualmente no tenemos ninguno.

-Han aprobado ya el presupuesto para este año. ¿Se ha visto muy limitado por la falta de actividad?

-Es conocido que el presupuesto no nos permite destinar fondos a inversión y este año se mantiene igual, no sufre modificaciones respecto a años anteriores. Se destinará íntegramente al mantenimiento de los servicios y el gasto ordinario. El ahorro conseguido por la falta de actividad se compensa en su totalidad con el gasto en las medidas del coronavirus y las bonificaciones por los paros en la hostelería.

-El concejo ha vivido un importante incremento de población en los últimos años. ¿La situación sanitaria ha afectado a esta tendencia?

-Cabranes tiene hoy 1.150 habitantes, habiendo experimentado un crecimiento de más de un 10% en los últimos años. Sí que se acentuó la llegada de nuevos residentes a la zona rural por la pandemia, lo observamos en la ocupación del vivero de empresas, aunque mayoritariamente hizo que se ocupase la segunda residencia. Y es posible que una vez volvamos a la normalidad retornen a su vivienda habitual aquellos que solo buscaban un desahogo temporal.

-Educación no ha dado apoyo a su proyecto para tener un CRA propio. ¿En qué punto se queda esta iniciativa?

-Mi responsabilidad como alcalde es representar y apoyar las demandas de nuestros vecinos. En este caso me habían trasladado mayoritariamente estar encantados con la metodología que se está llevando a cabo en el centro de Santolaya, la cual es en gran parte la responsable del aumento de matrículas de los últimos años. En ningún caso se pretendía ni se pretende producir ningún trastorno a nadie ni mucho menos afectar al alumnado o familias del centro que pertenece a Nava. Tenemos muy claro que el bienestar de los alumnos y la calidad educativa es lo primero para todos. Si tenemos que seguir siendo un CRA de dos municipios, como tenemos más aulas en Cabranes y más alumnado, solicitaremos el traslado de la cabecera de Ceceda (Nava) a Santolaya.

-¿Qué obras quedan pendientes en infraestructuras?

-La carretera de Peñella era una deuda histórica como también lo es la segunda fase de la CB-1, que está en fase de adaptación y que esperamos en las siguientes anualidades se pueda resolver. Para este año la Consejería de Infraestructuras incluyó en el proyecto de presupuestos 52.000 euros para la adecuación de la carretera de la Puerta a Arboleya. Tenemos muchos más proyectos pendientes para ir realizando, como son la carretera de La Llomba y otros que comenzarán de manera inmediata, como el abastecimiento de Niao. La disponibilidad presupuestaria con la última reforma del Gobierno central permitirá ejecutar las pequeñas obras también paradas y otros proyectos, como la escuela de 0 a 3 años o actuaciones de ahorro energético.

-¿Cómo va el proyecto para ampliar el vivero de empresas?

-El vivero de empresas sigue siendo la apuesta principal de espacios para emprender como pieza fundamental para fijar población. La novedad es que en la actualidad apenas quedan dos oficinas por utilizar y pronto aquel sueño de llenarlo será una realidad. Existe además demanda para más naves, en la próxima comisión de selección quedará una empresa en lista de espera y nos constan varios interesados en dichos espacios, por lo que esperamos encontrar pronto toda la financiación para esa demanda real de techo industrial.

-El de Cabranes fue uno de los primeros ayuntamientos en apostar por una programación 'online' con el Festival del Arroz con Leche. ¿Cómo se presenta este año?

-El año pasado el festival coincidió con los últimos días de confinamiento. La apuesta virtual del festival funcionó precisamente porque estábamos en casa. El escenario posible para este año no será ni por asomo la antigua normalidad, pero tampoco será, esperemos, un confinamiento domiciliario. Es posible que no se pueda realizar casi nada presencial y estamos trabajando en todas las posibilidades.