Capturadas 5.000 reinas de avispa asiática en el trampeo de Valdés
El sector apícola considera que es el método más efectivo para frenar su expansión y exige más recursos
BELÉN G. HIDALGO
LUARCA.
Domingo, 21 de octubre 2018, 04:56
«El trampeo es el método más efectivo para controlar la avispa asiática». Así de rotundo se mostró el presidente en funciones de la Asociación Antivelutina del Occidente, Jonathan Suárez. Solo en el concejo de Valdés, donde opera el grupo de trabajo de este colectivo, lograron atrapar 5.000 reinas de avispa asiática esta primavera. Estas cifras, según destacó, corroboran el éxito de un trampeo selectivo y coordinado. Y es que el colectivo, dijo, ha pasado de capturar cien ejemplares al día a no coger siquiera una decena en una semana.
«La diferencia es brutal. Donde se trampeó, está todo más controlado que el año pasado. A estas alturas se habían retirado 150 nidos en 2017 y este año solo recogimos 35 en el concejo», recalcó Suárez.
Pese a los buenos resultados, el sector apícola y los colectivos involucrados en frenar el avance de esta especie invasora demandan más esfuerzos a las administraciones publicas para impedir la propagación de esta plaga. El secretario de la asociación de productores de miel de Asturias (Promiel), Julio Fernández, considera necesario que las instituciones se involucren más, «sobre todo, económicamente. El trampeo no debe recaer solo sobre el voluntariado. Se debe presentar un protocolo en todos los ayuntamientos y crear grupos de trabajos coordinados para evitar su avance», indicó Fernández.
Aunque resulta imposible controlar el número de trampas colocadas, desde la Asociación Antivelutina del Occidente estimaron que, solo en Valdés, se podrían haber instalado unas 500, a las que habría que sumar aquellas que los particulares no notifican a la asociación y a las autoridades. En este sentido, Suárez recordó que «el trampeo sirve también para recopilar información sobre el comportamiento y localización de la avispa. Toda esta información nos permite trampear de forma selectiva al año siguiente, porque es imposible hacerlo en todo el concejo por las dimensiones».
Nuevas soluciones
De cara al futuro, afirmó que resulta imprescindible continuar con esta línea de trabajo y ampliar el horizonte. «El trampeo no debe olvidarse. Hay que continuar buscando soluciones porque el problema sigue ahí». Fernández insistió en remarcar que el trampeo ha permitido contener su avance, pero no erradicar esta especie invasora. En ello también coincidió el presidente de la asociación contra la avispa asiática. En su opinión, «hay que continuar con él, porque se puede reproducir el problema, al menos hasta que no se encuentre un método que logre erradicar la plaga».
Desde Promiel advierten del daño que esta especie supone para la apicultura, al dejar sin actividad las colmenas. «La avispa asiática (Vespa velutina) hace que las abejas no se atrevan a salir por miedo a ser devoradas. Se sitúa a unos 30-40 centímetros de ellas, esperando a que salgan para darles caza», explicó el secretario del colectivo de productores. En este sentido, el presidente del colectivo contra la especie asiática en el occidente asturiano añadió que el 80% de la base alimenticia de la avispa son insectos polinizadores. «Si merman este tipo de bichos, se acaba con la base de la vida natural», concluyó.