El humilde colegio público de Cornellana, «la bendición del pueblo» desde hace 40 años
El centro, con 11 maestros y 47 alumnos, homenajea a sus antiguos directores y reitera su apuesta por la educación «inclusiva y familiar» en la zona rural
Á. RODRÍGUEZ
SALAS.
Sábado, 9 de abril 2022, 02:15
Las familias de Cornellana están encantadas con su colegio público, y no es para menos. «Es un lujo, son clases muy pequeñas con atención casi ... individualizada. Es como un hogar. Escuelas como esta no deberían cerrar nunca», asegura Alexia Menéndez, exalumna y madre de actuales estudiantes.
Con 47 alumnos y 11 profesores, el colegio público de Cornellana celebró ayer sus cuatro décadas educando a generaciones de salenses y ganando nuevos miembros cada años. «Mantener un número de niños como se mantiene aquí es muy positivo. Este sigue siendo un centro base, mejora de año en año en cuanto actividades», sostiene Ana Pérez, concejala salense de Infancia.
Una tendencia que confirma Hugo Carreño, actual director del centro. «Gracias a los proyectos que desarrollamos logramos incorporar tres nuevos alumnos, uno de Oviedo y dos de Piedras Blancas», apunta. En cuarenta años, sólo tres directores encabezaron el centro, lo que para Carreño demuestra la implicación con el alumnado y el ambiente familiar que se vive en el colegio.
Así, «como en casa», los antiguos e históricos directores, Joaquín Martínez, de 88 años, y Bernardino Fernández, recibieron, emocionados, el homenaje sincero de la comunidad educativa a la que pertenecieron durante tantos años. «Cuando abrimos había 245 alumnos, pero no teníamos ni siquiera menaje para darles de comer. Algunos pensaban que no habría alumnos suficientes pero a última hora había que desdoblar cursos y juntarlos a todos en el salón de actos, unos 60. Fue una bendición para el pueblo», recuerda con nostalgia Martínez.
Por su parte, con veinticinco años como director a sus espaldas, Bernardino asegura que el centro fue en su día «el referente cultural y deportivo de la villa de Cornellana. Es del pueblo y debe ser usado por el pueblo».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión