Más de 120 vinos compiten en el certamen Atlantic que ideó Juan Manuel Redondo
En su primera edición compiten bodegas de España, Inglaterra, Portugal y las regiones francesas de Burdeos y Países del Loira
BELÉN G. HIDALGO
CANGAS DEL NARCEA.
Martes, 22 de septiembre 2020, 00:06
Misión cumplida. La Denominación de Origen Protegido (DOP) Vino de Cangas sacó adelante la primera edición del certamen Atlantic, un escaparate para los vinos de influencia atlántica. El concurso fue pensado hace años por el impulsor de la marca de calidad Juan Manuel Redondo, que «siempre defendió que estos vinos no eran entendidos y que necesitaban un foro específico para darles su lugar. Se lo debíamos», explicó la técnico de la DOP, Alicia Fernández.
En su primera edición ya ha conseguido la categoría de internacional, pues 127 vinos procedentes de España -País Vasco, Cantabria, Asturias, León, Galicia, Huelva, Cádiz y Canarias- se miden con las propuestas de bodegas de Portugal, el sur de Inglaterra y las regiones francesas de Burdeos y Países del Loira. «Es un vino con una acidez importante, fresco y que tiene en el fondo una finura y una longevidad especial», matizó David Fernández-Prada, director técnico del certamen.
Hoy se premiarán los vinos en base a ocho categorías, que son tintos y blancos jóvenes, maduros y envejecidos, rosados y generosos. Los premiados habrán pasado una doble criba a ciegas de un jurado «espectacular», integrado por 17 expertos «del más alto nivel», señaló Fernández-Prada.
«Es un concurso que reúne vinos muy especiales, que hablan por sí solos. Se identifica un perfil por la influencia del Atlántico, pero sí que clasifica mucho cada zona, que se diferencia por el color o la estructura en boca», destacó Marcelino Calvo, durante la cata de vinos tintos.
«Buen nivel»
Por su parte, Noemí Martínez, optó por dejarse sorprender. Y lo logró. «Son vinos 'disfrutones', es decir, uno los prueba y no puede parar en boca, son frescos e invitan a seguir bebiendo. Son, además, muy diversos», señaló.
Ismael Álvarez afirmó sentirse como en un «carrusel» de calidad ante las propuestas presentadas, tras afirmar que «hay muy buen nivel, aunque en algunos vinos se echa de menos más complejidad». «Hay que darles tiempo para que el vino se adapte y se sienta cómodo en su nuevo traje, que es la copa», defendió.
El jurado, además, visitó las bodegas y pudo conocer los viñedos cangueses. «Están entendiendo los vinos de la zona y es una gran oportunidad para poner Asturias en un mapa cada vez más complejo», concluyó Fernández-Prada.