Un argayo obliga a cortar la carretera de Sardalla, en Ribadesella

La carretera RS-2, ubicada en el concejo de Ribadesella, permanece cortada desde la mañana del pasado sábado debido a un argayo de grandes dimensiones. La vía amanecía completamente sepultada por toneladas de tierra, rocas y árboles a la altura de la localidad de Sardalla. De forma inmediata se procedió al corte de la misma y hasta el lugar se desplazaron efectivos del Servicio de Obras del Ayuntamiento riosellano, además de una pala y dos camiones que trabajaron de forma ininterrumpida hasta conseguir dejara limpia la carretera en torno al mediodía de ayer. Sin embargo, la inestabilidad del terreno y la continua amenaza de lluvia, con nuevos chaparrones durante la tarde del domingo, hacen que la vía siga cerrada a los vehículos por precaución. «Aunque el argayo ya se retiró decidimos mantener el corte por seguridad, porque sigue lloviendo y no deja de caer material», indicaba ayer el concejal de Obras y Servicios, Luis Díaz Bermúdez. Y reconoció que es preciso «estudiar con calma» la situación para ver qué hacer a continuación. La reconstrucción de la ladera que se ha venido abajo será cuestión de valoración para actuaciones futuras.

Las intensas lluvias caídas en los últimos días fueron las causantes de este argayo y de otros problemas en el concejo riosellano, como por ejemplo, la suspensión de las visitas turísticas a la cueva Tito Bustillo debido a la crecida del río San Miguel, afluente del Sella que atraviesa la cueva paleolítica Patrimonio de la Humanidad.