Coronavirus | Pruebas «a la puerta de casa» para todo el pueblo de Sobrefoz

La localidad pongueta de Sobrefoz ha sido la tercera de Asturias en someterse a un cribado comunitario para detectar casos de coronavirus entre sus residentes. Después de que el fin de semana se conociesen los positivos de tres vecinos, esta mañana un total de 72 personas han realizado las PCR. Lo han hecho en el centro social del pueblo y con una metodología distinta a la aplicada en Poo de Cabrales, donde Salud realizó el primer cribado a todo un pueblo. En esta ocasión, en lugar de citas individuales, los ponguetos han acudido por núcleos de convivencia, de modo que los habitantes de las 33 casas han llegado escalonadamente. «Con la gran colaboración del Ayuntamiento, el censo se hizo por unidades de convivencia y así se evitan aglomeraciones», destacó el gerente del área sanitaria VI, José Manuel Llera.

Ponga era hasta este fin de semana uno de los treinta concejos asturianos libres de coronavirus, pero el cambio de situación no ha minado la tranquilidad de los vecinos. «Que iba a llegar estaba claro», indicó Luis Antonio Sánchez, propietario de uno de los dos bares de Sobrefoz. Ambos están cerrados «por precaución». «Esperaremos al resultado de las pruebas y veremos si abrimos, extremando las precauciones. Hay gente mayor y eso nos preocupa», confesó. Con 90 y 86 años, el matrimonio formado por Antonio Corral y María Esperanza Suárez decía «estar encantados de que nos hagan las pruebas». Residen la mayor parte del año en Bélgica, a donde emigraron hace casi seis décadas, y a Sobrefoz habían llegado a comienzos de agosto. «En Bélgica estuvimos tres meses sin salir de casa, ni a comprar», contaron. El virus, sin embargo, les ha tocado más de cerca en la pequeña aldea.

Para algunos habitantes del pueblo, la de este martes ha sido otra PCR más a añadir al contador. «Es la segunda vez que la hago desde el sábado, pero esta será la sexta», explicó María Prado, trabajadora de la residencia. Junto a ella han pasado también la prueba sus hijas, de 4 y 3 años, que como el resto de niños del pueblo no han acudido a clase esta semana. «Está muy bien que hayan venido a hacerla aquí porque hay gente que no tiene coche. Genial así, a la puerta de casa», destacó. Para Sara Rosa Sánchez, esta ha sido su segunda PCR, a la que se enfrentaba con tranquilidad. «Nos habíamos autoconfinado solos, somos un pueblo autosuficiente y responsable», dijo. Prueba de ello son los jóvenes vecinos Toni Palop y Marta Sánchez, que tras mudarse desde Murcia comenzaron a trabajar en la hostelería local. Su bar, en Beleño, también permanece cerrado. «Lo hicimos nada más que nos enteramos porque pasa todo el pueblo, somos casi una oficina», indicaron.

También la alcaldesa de Ponga, Marta Alonso, destacó la actitud responsable adoptada por los vecinos de Sobrefoz, un pueblo con tradición de «organizarse y tener una mentalidad de grupo arraigada». «Este es un pueblo con mucha vida social y la mayor parte de la gente es familia, además la edad es elevada y hay personas de riesgo. Es importante el cribado para eliminar la incertidumbre», dijo. Alonso insistió además en la «rapidez» de las pruebas colectivas. Los resultados se conocerán previsiblemente en la mañana de este miércoles.