El futuro Plan General de Llanes tendrá como base la defensa del paisaje

Proteger y poner en valor los paisajes de Llanes. Esa es una de las líneas maestras que tendrá el futuro Plan General de Ordenación (PGO) de Llanes, documento que redacta ya la unión de empresas formada por Andrés + LL Masiá y Planz Planeamiento Urbanístico, después de hacerse con este contrato y haber presentado, con diferencia, la mejor oferta técnica de las tres sociedades que optaron a elaborar el documento.

En el informe redactado por el comité de expertos que asesoró al Consistorio sobre la propuesta planteada por la adjudicataria, se destacaba de la misma la importancia que da a proteger el entorno y los recursos naturales del concejo. Para ello se apuesta por la necesidad de que las administraciones competentes realicen una «declaración efectiva de los Paisajes Protegidos de la Costa Oriental y de la Sierra del Cuera previstos en el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de Asturias (PORNA)».

También se incide en la conveniencia de «revitalizar el espacio rural» con especial atención a «su función productora de alimentos de calidad ligados al lugar y de las funciones ambientales y paisajísticas que desempeña». En este sentido califica a los asentamientos rurales de «piezas medulares de la organización e imagen de los paisajes».

Para ello propone diferentes iniciativas. Por un lado está el tener el «máximo respeto a los amplios y ricos valores del medio» con propuestas como la elaboración de un «catálogo de recursos naturales en el que se localicen y definan medidas concretas para la conservación de los elementos más valiosos del medio natural».

En este sentido se apuesta por «dinamizar producciones locales ligadas al territorio», como son las de ámbito agroalimentario que ya se dan en el concejo, pero también las construcciones tradicionales, caso de caserías, cabañas, refugios, hórreos, caminos o puentes, entre otras.

Precisamente las cabañas «distribuidas de forma dispersa por los terrenos de la sierra» gozan de una especial atención por parte de los redactores. Estiman que sería conveniente potenciar las utilizadas por los ganaderos, pero apuestan también por darles un uso de refugio o residencias temporales sujetas a una serie de limitaciones y orientadas a favorecer la ganadería extensiva y fomentar «las actividades turísticas asociadas al senderismo o al excursionismo».

Para ello se aboga por «potenciar las actividades agropecuarias basadas en la explotación sostenible de los recursos naturales, la formación de bancos de suelo con la finalidad de evitar la pérdida de superficies agrarias útiles, así como promover el uso continuado y adecuado de la actividad agraria» en dichas parcelas. En esta línea se plantea la posibilidad de «cartografiar los prados y pastizales del concejo para diagnosticar su calidad, con el fin de facilitar su recuperación, puesta en valor y uso sostenible».

Se apuesta también por dar una protección específica a las masas forestales incluyendo en el PGO las figuras que establezcan «su regulación bajo criterios de protección, integrándose en el suelo no urbanizable protegido». Asimismo «se propone la definición de unas condiciones que favorezcan la repoblación selectiva con especies autóctonas, recuperando espacios que han quedado despoblados debido a quemas y que carecen de aprovechamiento ganadero».

Otra cuestión que considera importante atender el equipo redactor del futuro planeamiento es la de «erradicar especies vegetales invasoras, tanto en el interior del concejo como en la zona costera, en coordinación con otras administraciones públicas».

En toda esta filosofía que se quiere dar a futuro planeamiento de Llanes, en el que la protección del entorno será uno de sus pilares, otra de las iniciativas por las que se apuesta «estimular» la movilidad sostenible, tanto a nivel peatonal, como ciclista o de transporte colectivo. En este sentido se proponen varias medidas. Una de ellas es la creación de «corredores verdes de la montaña al mar», que se integren en la «red natural de los núcleos y asentamientos urbanos, con sus espacios libres más significativos, hasta las rasas costeras y desembocaduras fluviales, restringiendo su conversión en viarios rodados convencionales del sistema urbano».

Otra es generar «un entramado continuo de recorridos públicos» que sirva para fomentar «la movilidad no motorizada». En esta línea las playas del concejo tienen un tratamiento específico ya que se quiere potenciar el acceso peatonal y en bici a las mismas, y de forma paralela alejar «todo lo posible las disposición de nuevos estacionamientos de vehículos en las proximidades de la línea de costa».