Ponga pide que su plan general, iniciado en 2004, se agilice

Ponga es uno de los concejos afectados por las largas tramitaciones que suponen los planes generales de ordenación (PGO). En su caso, la contratación se remonta a 2004 y en 2019 tuvo que ser sometido a una actualización. Para su aprobación definitiva están ahora pendientes de solventar el «atasco» del catálogo, explica la alcaldesa, Marta Alonso, quien recuerda la necesidad de «agilizar» tanto ese documento como el resto de trámites urbanísticos. Así se lo trasladó ayer a la directora general del ramo, Sonia Puente, con quien mantuvo una reunión telemática. «No podemos permitirnos que gente que quiera invertir en el concejo se venga atrás por la burocracia. Ya hubo casos incluso de perder subvenciones», explicó Alonso. Ocurrió, ejemplificó, con un proyecto en Viboli que «echó atrás Cultura». «La burocracia tiene que ser acorde a los territorios», instó.