El Principado rehabilitará la rula tras las quejas de los pescadores riosellanos

Cerca de un millón de euros para conservar y mejorar el puerto de Ribadesella. Es la cifra con la que ayer acudieron a la villa los directores generales de Infraestructuras Viarias y Portuarias y Pesca Marítima, Esther Díaz y Francisco González. El montante se dividirá en tres grandes actuaciones que vienen a dar respuesta a las demandas que los profesionales llevan años haciendo. Así, explicó Díaz, a lo largo de este año se acometerá el dragado de la zona pesquera, se iniciarán las obras de reparación del muelle abierto y se redactará el proyecto de rehabilitación de la maltrecha rula.

La obra que mayor presupuesto requerirá será la del muelle abierto, con un coste de 605.000 euros. «La previsión es adjudicar la actuación este año e iniciarla en los últimos meses con un primer pago de 200.000 euros», señaló la responsable de Infraestructuras Viarias y Portuarias. Será «una puesta a punto» de una estructura que «es antigua y tiene problemas de durabilidad». Así, entre otras cosas, la «actuación integral» contempla varios aspectos, «desde la reparación de los pilares y las vigas tanto principales como secundarias hasta la losa superior».

La segunda gran intervención incluida en las cuentas regionales, el dragado, sí que se completará previsiblemente a lo largo del presente ejercicio. «Serán 330.00 euros y la tramitación nos llevará hasta agosto, así que seguramente se acometerá después del verano», indicó Esther Díaz. Y explicó que solo se actuará en la zona pesquera, ya que es la que puede optar a fondos europeos. «La zona deportiva no y por eso debemos planificarlas de forma independiente», señaló.

Finalmente, el menor montante, de «unos 40.000 euros», se destinará a cubrir otra de las grandes demandas de los pescadores riosellanos, quienes hace apenas unas semanas denunciaban a través de las páginas de este diario el mal estado en que se encuentra la rula. «Para este año tenemos previsto redactar el proyecto, que al tratarse de un edificio protegido debe hacerse cumpliendo los criterios de Patrimonio, lo que conlleva una tramitación un poco más dilatada», apuntó la directora general. La ejecución de los trabajos, agregó, quedará pendiente para el 2022.

El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores Virgen de Guía, Manolo Buenaga, y el celador Juan Suárez fueron los encargados de guiar la visita de los directores por la lonja, señalando las diferentes necesidades. «Repararemos el suelo, el soldado y las humedades, será una rehabilitación completa del edificio». prometió Esther Díaz.