Ovidio Zapico: «Deja una huella imborrable en la izquierda asturiana»

«Referente insustituible de la lucha obrera», «ejemplo de valentía y resistencia» y «feminista antes de que se hablara del feminismo». Ayer fueron muchos los dirigentes y militantes del Partido Comunista, Izquierda Unida y Comisiones Obreras, pero también del PSOE y otras fuerzas de la izquierda, los que recordaban de esta manera a Anita Sirgo, quien falleció en la madrugada del lunes a los 93 años. El coordinador de IU Asturias y consejero de Ordenación del Territorio, Urbanismo, Vivienda y Derechos Ciudadanos, Ovidio Zapico, se refirió a ella como una persona «totalmente comprometida con la lucha política, social y sindical y con las mejoras de las condiciones de la clase trabajadora» que «ha dejado una huella imborrable en la izquierda asturiana, donde siempre estará presente en nuestro corazón, pensamiento y acciones». «La historia está en deuda con ella. Anita era una mujer inquebrantable y un referente de vida», añadía el secretario general de CCOO de Asturias, José Manuel Zapico. «Es una referencia insustituible en la lucha durante la larga noche de la dictadura franquista», la recordaba el secretario general de la FSA y presidente del Principado, Adrián Barbón. «Los derechos y la democracia se la debemos a mujeres como Anita Sirgo. Ha muerto tras una vida de lucha», dejaba escrito la ministra de Trabajo y líder de Sumar, Yolanda Díaz.

«Creía tanto en el valor y tan poco en las princesas que se convirtió en una suerte de Cenicienta de la lucha obrera», señalaba la diputada de Podemos, Covadonga Tomé. «Una de esas mujeres valientes a las que Asturias y toda España les debe la democracia y las libertades», recogía en sus redes sociales Enrique Santiago, secretario general del PCE. «La libertad y la democracia se empezaron a disputar desde las entrañas de la tierra gracias a mujeres como Anita», completaba Unai Sordo, secretario general de CC OO.