Salud pide disculpas a los afectados por las colas en la vacunación

Que octubre es en Asturias un mes casi tan lluvioso como abril no es un secreto. Y que las primeras jornadas de vacunación contra la covid suelen generar grandes colas, en particular en los centros habilitados para ello en polideportivos de las grandes ciudades asturianas, tampoco. Y, sin embargo, ayer volvió a ocurrir la conjunción de los dos fenómenos: grandes colas en el exterior de los polideportivos y lluvia sobre las personas que aguardaban para ser inoculadas, con el agravante de que muchas, engañadas por el sol de primera hora de la mañana, acudieron a vacunarse sin ropa contra la lluvia ni paraguas, lo que incrementó el enfado de las personas que, llegadas al centro de vacunación a la hora que habían sido citadas, se encontraron con grandes colas, en particular en el centro gijónés habilitado en el polideportivo de La Tejerona, entre El Coto y Viesques.

El gerente del área sanitaria V, Manuel Bayona, se refirió posteriormente sobre este asunto. «En Gijón, como en otras zonas de Asturias, dimos comienzo con la vacunación de personas mayores frente a la covid y la gripe». El objetivo, señalaba, es administrar las dosis «lo antes posible» al máximo número de personas vulnerables. En detalle, informaba, eran 1.800 las que ayer estaban llamadas a acudir a La Tejerona. «Debido a la meteorología, hubo lluvia, y al tráfico se han ocasionado molestias a las personas mayores y a los familiares que les acompañaban. Por esto, les pedimos nuestras más encarecidas disculpas».

El responsable sanitario anunció, además, cambios para aplicar a partir de hoy, el jueves y el viernes -mañana es festivo- y se van repartir las citaciones en dos puntos distintos. Serán 500 las llamadas al autocovid que se ubica en la avenida de la Pecuaria, y el resto, 1.300, en La Tejerona. Esta medida está enfocada a «evitar lo posible estas aglomeraciones».

También, indicaba Bayona, se ha pedido al Ayuntamiento de Gijón que vuelva a ceder el polideportivo, a partir del 17, para proceder allí con la vacunación, «porque hay más espacio y facilidad para el tráfico».

Entre las afectadas por los problemas de ayer, se encuentra Griselda Villa, de 88 años, que se quejaba de la aglomeración de personas citadas en el recinto: «El mayor agobio sucedió sobre las dos y media de la tarde. Había mucha gente, todos estábamos muy cerca». Por su parte, María Luisa Rodríguez asegura que estuvo «dos horas esperando bajo la lluvia, fue horrible», lamenta. Al entrar se encontró con «una cola inmensa». Coinciden en que fue una mañana «vergonzosa».