El tubista Pablo Fernández pone una pica en Dinamarca

En su currículo inabarcable destaca también su condición de miembro fundador del Spanish Tuba Quartet, el Cuarteto de Trombones de Barcelona, el Barcelona Brass Ensemble y el quinteto de metales Barcino. Y ha colaborado con numerosas jóvenes orquestas y sinfónicas de España, Francia y Dinamarca, incluida la OSPA.

Participó en numerosas grabaciones. Con su orquesta ganó en 2000 dos Grammy Latino al 'Mejor álbum clásico' con el disco 'La Dolores', en el que colaboró el tenor Plácido Domingo. Y en 2006, con 'Rahpsody in Blue', en colaboración con el eminente pianista dominicano Michel Camilo. También aparece en alguno de los trabajos discográficos de la cantante catalana Nina y del cantautor tinerfeño Pedro Guerra.

Además, ha girado por casi una veintena de países de Europa, América y Asia y ha tenido el privilegio de actuar en escenarios emblemáticos como el Carnegie Hall, de Nueva York; el Musikverein, de Viena, o el Royal Albert Hall, de Londres. Desde 2010 es artista de la marca Miraphone.

Fernández se muestra muy ilusionado con este nuevo proyecto docente en Aarhus, que desarrollará junto a su colega danés Mattias Johansson, tuba solista de la Orquesta Sinfónica de Aalborg. La academia de Aarhus imparte estudios superiores musicales, divididos en Bachelor, Máster -gratuito para todos los que acceden- y diploma de Solista, que suman un total de siete años.

Este centro internacional ofrece muchas facilidades para acoger estudiantes del programa Erasmus y cuenta con una docena de alumnos españoles. Además de poder optar a becas de la UE, el Gobierno danés concede una ayuda mensual de ochocientos euros a los estudiantes que trabajen 43 horas al mes en cualquier empleo, lo que les permite vivir de forma desahogada.

La academia dispone de cuarenta cabinas individuales, una veintena de aulas grandes y otras de mayores dimensiones, aunque, como buen poleso, Fernández se declara «enamorado de la cantina». Uno de los detalles que más le ha llamado la atención es que las audiciones «están abiertas al público en general, lo que te da la sensación de estar tocando en un concierto y eso ayuda mucho a la formación», explica. De la ciudad de Aarhus, destaca «la calidad de vida», tras residir dos décadas en Barcelona.

Aquel progénito de Manolo, 'el del Xingo', de vocación musical precoz, al que se le veía de guaje pasear radiante por el parque de la Pola con un minúsculo órgano Casio, o que se entretenía escuchando a las orquestas cuando ayudaba en las fiestas a recoger vasos de la sidrería paterna, posee de adulto otra afición de altos vuelos. Tiene la licencia de piloto privado de avión (PPL) con habilitación para monomotor y surca los aires al mando de un Cessna 172S G1000 de ala alta. Y es que dominar el viento ha sido siempre su estímulo vital.