Los sindicatos insisten en aumentar la ratio de personal para «un servicio seguro»

Los trabajadores de la red geriátrica asturiana han vivido en primera línea la batalla contra el coronavirus. En total, 243 de ellos se han visto afectados por la nueva enfermedad. Los sindicatos que los representan creen que su opinión y experiencia debe tenerse en cuenta. Sobre todo cuando se está debatiendo cómo va a ser la asistencia en las residencias geriátricas a partir de ahora y se incide en aspectos tan importantes como el reparto de la carga asistencial para garantizar la calidad de los cuidados.

Desde UGT creen que si algo enseñó esta pandemia es que «hay que ir a otro modelo de residencia». Unas residencias en las que primen «las habitaciones individuales, en las que los baños no se compartan, haya comedores por planta y espacios más amplios donde puedan estar los residentes con suficiente distancia en caso necesario», enumera Ana Roza, presidenta del comité de empresa del ERA. Esas medidas evitarían que en casos como el de la pandemia «tengan que estar confinados en su habitación», añade.

Pero las nuevas medidas también hablan de remodelar la distribución del trabajo. En este sentido, Roza señala que «se debería trabajar con equipos por plantas y aumentar la ratio actual de personal». Asegura que la pandemia evidenció que esa proporción de trabajadores por número de usuarios «es escasa». Con más personal «también se podría ir a un modelo de atención más individualizado». Considera importante facilitar formación periódica al trabajador «en materia de evacuación o aislamiento». Para este último caso, dice que cada centro debería disponer de «un número suficiente de habitaciones libres en caso de necesidad», concluye.

La delegada de CC OO en el ERA, Geni Tamargo, apunta por su parte que el futuro de las residencias públicas pasa porque todas tuviesen el modelo de la residencia Mixta (Gijón) o de la de Santa Teresa (Oviedo). «Estos centros disponen de todos los profesionales: médicos, psicólogos, enfermeros. Las habitaciones son individuales y, sobre todo, por la actualización de ratios». Tamargo cree que es necesario que se dote al ERA de más presupuesto, así como de más personal y recursos humanos y materiales. «Esta crisis demostró las carencias de muchas residencias públicas. Algo que este sindicato lleva denunciando desde hace mucho tiempo», afirma.

En el ámbito de los centros privados, CC OO señala que «el problema más agudo es la falta de personal». Indican que es demasiado frecuente encontrar «con que no se cubren los puestos durante los periodos de incapacidad laboral, vacaciones o permisos ». Así, estima la representante laboral, no se puede dar una atención «con un mínimo de calidad» a los mayores asturianos. La Administración «tiene que ejercer una labor de vigilancia estrecha», solicitan.