Susto en un Alvia al sufrir el maquinista una indisposición que le obligó a dejar la cabina

Susto en el Alvia 4140 Gijón-Madrid-Alicante, que inició su ruta a las 14.12 horas. El maquinista que estaba a los mandos del ferrocarril modelo S-130 sufrió una indisposición cuando el convoy se encontraba todavía circulando por Asturias. Un fuerte dolor en el pecho empezó a afectarle, motivo por el cual se puso en contacto con el puesto de mando, cuando el tren estaba en las inmediaciones de Mieres. Tras advertir al médico de la compañía, el conductor habría confirmado que era capaz de avanzar hasta la siguiente parada, Pola de Lena. Allí reside otro compañero de la base asturiana de maquinistas, que fue el que se encargó de ponerse a los mandos y retomar el viaje, con entre 8 y 15 minutos de retraso, según las fuentes consultadas. Desde la capital lenense el conductor indispuesto fue movilizado al hospital Vital Álvarez-Buylla de Mieres, el más cercano, donde se le practicaron diversas pruebas y se lo sometió a observación. Sus compañeros manifestaban ayer por la tarde que el hombre estuvo consciente en todo momento y sus allegados confirmaron por la noche que se encontraba bien y a salvo.

Cabe recordar que este tipo de ferrocarriles vienen dotados de un sistema para impedir que el eventual desvanecimiento de un maquinista derive en accidente ferroviario. El dispositivo es un pedal que el conductor está obligado a pisar cada pocos segundos, lo que verifica que se encuentra en condiciones. Si el profesional no efectúa dicha maniobra, hay un freno automático que de inmediato se dispara deteniendo la unidad.