Avilés y La Coruña se unen en un frente común para salvar sus fábricas de aluminio
Las alcaldesas se alían con los comités de Alu Ibérica para reclamar al Gobierno una reunión que permita solucionar la grave situación actual
YOLANDA DE LUIS
AVILÉS.
Miércoles, 31 de marzo 2021, 01:53
Un frente común en defensa del futuro del aluminio. Ese es el resultado de la reunión que ayer mantuvieron en la ciudad las alcaldesas de ... Avilés y de La Coruña, Mariví Monteserín e Inés Rey, respectivamente, con los comités de empresa de las dos plantas de Alu Ibérica en ambas ciudades para analizar los graves problemas actuales en las fábricas en las que producción está prácticamente paralizada.
Las regidoras se aliaron con los representantes sindicales en la búsqueda de una solución política para el futuro de las factorías en ambas ciudades, convencidas de que «el aluminio tiene futuro» y anunciaron que reclamarán tanto a los respectivos gobiernos autonómicos como al del Estado que se convoque una mesa general en la que se aborde el futuro de la compañía, en ella se sentarían todas las administraciones y los sindicatos.
Ambas compartieron que «con independencia del camino judicial, urge una solución a la situación actual», conscientes también de que el próximo 31 de julio (en sólo cuatro meses) se cumplen los dos años de garantía de empleo en las fábricas que se recogían en el acuerdo con el que Alcoa vendió sus plantas de Avilés y La Coruña, una decisión tutelada por el Ministerio de Industria en julio de 2019 .
«El aluminio tiene futuro y confiamos en que tenga solución, porque si tenemos dos plantas con garantías de producción no podemos renunciar a que haya un proyecto industrial para ellas», defendió Monteserín. Reconociendo a la vez que el camino para lograr esto «no es fácil», refiriéndose al proceso que se sigue en la Audiencia Nacional contra los dirigentes del Grupo Riesgo que ahora dirige la compañía. La alcaldesa de Avilés cree que por eso urgen sentarse todas las partes a la mesa para «hacer un análisis y ver cómo entre todos logramos un futuro».
Y en cuanto a la unión de la decisión sobre las plantas de Avilés y La Coruña a la que se tome sobre la de San Ciprián, algo que desde Industria se ha repetido en el último mes en varias ocasiones, la alcaldesa avilesina se mostró contundente en su opinión similar a la de su homónima coruñesa: «San Ciprián tiene su propio recorrido y está en otro momento de la agenda, no ha llegado a la grave situación de nuestras factorías, nosotros estamos en una situación muy urgente por lo que la reunión que pedimos es de una necesidad imperiosa».
Por su parte, la primer edil de La Coruña insistió en que la industria del aluminio «es viable, y tiene que serlo además con unas condiciones laborales dignas», en referencia a las continuas denuncias de los sindicatos a los actuales gestores por saltarse los derechos de los trabajadores. Inés Rey mostró su compromiso «firme» de trabajar con la alcaldesa de Avilés para que «ambas administraciones autonómicas, y además la de Galicia con competencias directas en industria, para que se reúna una mesa que establezca las condiciones de futuro para las fábricas, porque con independencia del camino judicial urge una solución», insistió.
El papel de Alcoa
La alcaldesa de Avilés también puso la mirada ayer sobre la responsabilidad de Alcoa en la situación a la que se ha llegado en las factorías que vendió. «Primero vivió buenos momentos y tuvo beneficios, pero en su final no ha cumplido ni con los territorios en los que estuvo asentada ni con los trabajadores que durante años contribuyeron a sus beneficios», lamentó Monteserín. Para la regidora, «Alcoa hizo una mala venta porque detrás estaba su intención de cerrar y puso las fábricas en manos de unas personas que en realidad son unos presuntos depredadores industriales, han venido aquí a otra cosa que nada tiene que ver con un proyecto industrial».
Por su parte, los presidentes de los comités de empresa en Avilés y La Coruña, José Manuel Gómez de la Uz y Juan Carlos López Corbacho, mostraron su satisfacción con el apoyo recibido de las máximas representantes de ambos ayuntamientos a su propuesta para conseguir sentar en la mesa a todas las administraciones, pero señalaron que «la solución no va a llegar de Avilés ni de La Coruña, es necesario convocar esa mesa general con los gobiernos regionales y central para dar una respuesta política al margen de la judicial, que como siempre hemos dicho pasa por la intervención de la SEPI», afirmó De la Uz.
Volvió a mostrar el malestar de los trabajadores con el gobierno de Asturias que, en opinión de los representantes de los trabajadores, «no está haciendo nada», por lo que espera que la petición que llegará ahora desde los ayuntamientos cambie la actitud. «Pedimos que la política actúe, no puede escudarse en el proceso judicial en marcha como está haciendo el Principado, porque si esperamos a que haya una respuesta de la justicia ya será seguramente tarde», anunció el presidente del comité de empresa de Alu Ibérica en Avilés. En este mismo sentido, López Corbacho urgió a que se celebre la reunión que reclaman todos a una desde Avilés y La Coruña «porque si no se hace rápido va a llegar el momento en el que ya no haya retorno a la situación».
Salida industrial
Cree el representante sindical gallego que la reunión de ayer en el Ayuntamiento de Avilés «inicia el camino para dar solución a las dos plantas», asegurando que es lo que necesitan los trabajadores de ambas factorías, pero también lo que necesitan las ciudades en las que se asientan. De esta forma ponía en valor el peso industrial y por tanto económico que el sector del aluminio ha tenido hasta hace dos años tanto en Avilés como en La Coruña.
Volvió a reclamar, como vienen haciendo ambos comités desde hace meses, «contundencia contra Alcoa, que debe asumir la responsabilidad de todo el daño que ha creado en nuestras comarcas porque es la gran culpable de la situación en la que estamos con una estrategia clarísima que destrozó las plantas».
En el discurso sobre la urgente necesidad de que se convoque, sin esperar a la decisión de la Audiencia Nacional, de una mesa con la administración central y las regionales, además de las locales y los trabajadores, el presidente del comité de empresa de La Coruña fue muy claro y afirmó que «los juzgados no nos van a dar una salida industrial. Hay que tomar decisiones valientes y los políticos y las instituciones están para tomar esas decisiones, no para esperar a que se las dé un juez».
Ahora, los representantes de los trabajadores esperan que la presión de las alcaldesas de Avilés y La Coruña lleven a que tanto los gobiernos de Asturias y Galicia como los ministerio de Industria y Trabajo muevan ficha y se produzca esa reunión pedida desde hace meses.
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