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Emma Cohen.
Fallece Emma Cohen, una mujer libre y moderna

Fallece Emma Cohen, una mujer libre y moderna

La actriz, que ha muerto a los 69 años a causa de un cáncer, fue musa de la progresía y compañera de Fernando Fernán-Gómez

oskar belategui

Lunes, 11 de julio 2016, 23:09

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Emma Cohen fue una mujer culta, libre y moderna. Una actriz que no se conformó con actuar, sino que escribió y dirigió. Una musa de la progresía cuya figura está indisociablemente unida a la de su compañero en el último medio siglo, Fernando Fernán-Gómez. Una burguesa que renegó de sus orígenes y eligió la bohemia de las bambalinas, una testigo del Mayo del 68 que tan pronto explotaba su belleza en pícaras comedias como levantaba el puño en el teatro más comprometido. Emma Cohen murió este lunes a los 69 años de un cáncer que sufría con discreción en el chalet de la urbanización madrileña cercana al RACE en el que vivió con el genial pelirrojo de la voz de trueno.

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Nacida en Barcelona en 1946, Emmanuela Beltrán Rahola era hija de unos padres abogados a los que no les hizo mucha gracia que su pequeña abandonara la carrera en cuarto curso para dedicarse al teatro. Con Mario Gas y Carlos Trías descubrió a Faulkner y Artaud. Intervino en 'Marat-Sade', el mítico montaje de Adolfo Marsillach, y arrancó en el mismo 1968 una filmografía guadianesca y variopinta, que se inicia con un título que certifica su origen 'gauche divine': 'Tuset Street'.

Su sensual languidez se paseó por títulos de todo pelaje: de 'El conde Drácula' de Jess Franco a 'Aborto criminal' de Ignacio F. Iquino; de 'Cabezas cortadas' de Glauber Rocha a 'Las petroleras', de Christian-Jaque. En 1970 conoció a Fernando Fernán-Gómez al coincidir en el reparto de 'Pierna creciente, falda menguante'. El actor quedó deslumbrado por aquella musa underground de la modernidad, veinticinco años menor que él, en la que encontró a su compañera hasta el final de sus días. Cohen apareció en películas suyas -'Bruja más que bruja', 'El viaje a ninguna parte'- y juntos escribieron guiones como los de la serie de televisión 'El pícaro'.

La pareja contrajo matrimonio en 2000, cuando Fernando Fernán-Gómez fue ingresado de urgencia en un hospital y llamó al juez para que les casara a pie de cama con una enfermera y el guionista Enrique Brasso de testigos. Emma Cohen fue testigo privilegiada de las tertulias con Manuel Alexandre, José Sacristán o Pedro Beltrán en la casa de la urbanización Ciudad Santo Domingo y, tal como cuenta Alfredo Landa en sus memorias, aguantó al actor cuando al tercer whisky se volvía hosco, agresivo y despótico. "Una preciosidad rebosante de talento", la desscribe Landa. "Buenos mimbres para una cesta que se fue río abajo, chocando con todos los pedruscos imaginarios".

Escritora de novelas, anarquista en 'Tigres de papel' -ella, que tenía carné de la CNT-, entrañable Caponata para los niños que merendábamos con 'Barrio Sésamo', Emma Cohen se alejó de los escenarios y las pantallas por amor. Durante los últimos diez años siguió trabajando en la mesa contigua a la de su marido, rodeada de miles de libros, papeles y recuerdos.

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