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Quince mujeres geniales

Quince mujeres geniales

Ángeles Caso presenta con una prosa brillante a protagonistas rebeldes, luchadoras, sufridoras y geniales

FULGENCIO ARGÜELLES

Sábado, 11 de enero 2020, 00:13

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Dicen que los argumentos de toda la historia de la literatura podrían resumirse en uno: el ser humano buscando la felicidad. En esa búsqueda el amor es una herramienta poderosa, un motivo, pero el amor no pocas veces se convierte en fuente de sacrificio, en dolor, en barricada en el camino hacia esa felicidad. Ángeles Caso (1959) nos habla en 'Quiero escribirte esta noche una carta de amor' de quince mujeres especiales, luchadoras, rebeldes, sufridoras, geniales. Con una prosa brillante y salpicada de emociones, nos presenta, en breves y agradecidas notas biográficas, a las quince protagonistas y nos muestra algunas de sus cartas de amor. Nos habla Ángeles Caso de la monja Eloísa, el primer grito de amor de una mujer en la cultura occidental, capaz de un amor sacrificio que estremece, mezcla explosiva de rebeldía y de sumisión. De la poderosa abadesa Hildegarda de Bingen, un trueno intelectual que hizo temblar a papas y emperadores. De la inteligente y libérrima Ninon de Lenclos, atea, epicúrea, poseedora de un talento social extraordinario y dueña de un poderoso nido de ilustración y de libertad. De la dulce Julie de Lespinasse, enganchada a la pasión, al opio y a la culpa y amada hasta la desesperación por tres hombres a la vez. De la luminosa Mary Wollstonecraft, que murió al parir a la que habría de ser la autora de Frankenstein y que vivió suplicando afecto y buscando con desesperación su independencia y su libertad. De la diosa Aurora, profunda, atrevida y tierna, que se alzó por encima de las trampas y decidió vivir como los hombres y fue George Sand, enamorada y rota, pero grande. De la institutriz Charlotte Brontë, de los amores imposibles y de las novelas enormes. De la impedida e invisible Elizabeth Barrett, que un día descubrió el milagro del amor y tocó las nubes y alcanzó la resurrección. De la exuberante Gertrudis Gómez de Avellaneda, caprichosa, intensa, que exhibía sin pudor su talento y su deseo de protagonismo en un mundo literario exclusivamente de hombres. De la condesa Pardo Bazán, católica, apostólica y casada, y, sin embargo, naturalista valiente y capaz del amor ilícito más grande. De la indomable y precoz Katherine Mansfield, tan avasalladora como vulnerable, escritora apasionada desde niña que apenas publicó en vida. De la brillante María Zambrano, siempre grande en una España encogida y pequeña. De la rusa Marina Tsvietáieva, poeta inmensa de versos infinitos y complejos, infiel compulsiva, tal vez mitómana patológica, desterrada siempre. De la frágil Virginia Woolf, pequeña «morera péndula» carente de «mundanidad» y de Vita Sackville-West, «secuoya gigante», segura y brillante, amando y amándose, escribiendo y escribiéndose. Y de Simone de Beauboir, viviendo la vida a tragos entre los amores contingentes y el amor necesario. Quince mujeres geniales para un libro espléndido y necesario y de lectura gratificadora y edificante.

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