«Compartimos el ritmo y algo imprescindible: la improvisación»

-Chano, ya ha tocado en el Campoamor.

-Por supuesto, y además tengo un gran recuerdo. He tocado varias veces. Además de hace muchos años, en los noventa, estuve con mi sexteto. Y con el proyecto de 'Lorquiana' con Ana Belén y también con el trío. Eso ya en los dos mil. Y me encanta, tanto el teatro como la tierra. Es un placer poder ir de nuevo y que se puedan ir haciendo ya algunas cosas.

-Hamilton, ¿qué están fabricando entre los dos?

-Tuvimos la suerte de hacer algunos conciertos en octubre. Pero antes de eso Chano fue a tocar a São Paulo y yo, que vivo en Río, fui allí para verlo y toqué con él dos temas en el concierto. Fue tan maravilloso que empezamos a hablar de hacer algo juntos y en octubre de 2020 comenzamos. Dentro de los problemas de la pandemia tuvimos mucha suerte. Cuando llegué aquí hice la cuarentena en casa de Chano y aprovechamos para repasar el repertorio, sacar ideas nuevas y en breve tenemos reservados tres días para grabar un disco. Así que todo va bien.

-Es una buena noticia.

-(Chano) Pues fíjate, vamos a contar con Rubem Dantas en la percusión, que es el músico brasileño precursor del cajón flamenco. También estará Silvia Pérez Cruz cantando, así que tendremos algo muy bueno y variado.

-¿Dónde encuentran el punto medio entre sus músicas?

-(Chano) Él ha traído un tema nuevo, que para mí supone una definición muy acertada. Estamos montando ese tema y el título es 'Afroflamenco'. Creo que por ahí hay una conexión muy fuerte, porque todos los ritmos que él toca, de tres por ocho, de doce por ocho, de tresillos, tienen mucho que ver con el ritmo del flamenco. A mí me parece que está tocando un tanguillo, una bulería, algo que nos acerca y hace que el discurso sea fácil y fluido.

-Comparten unas músicas partiendo de lugares diferentes.

-(Chano) Yo creo que además del ritmo compartimos algo imprescindible, que es la creatividad, la improvisación. Y el hecho de que él es un músico completo. Es un músico clásico. Todos sus temas están compuestos con un esquema clásico con todo anotadísimo y estructurado. Y después improvisa. Improvisamos los dos. Nos gusta tirarnos a la piscina.

-Y en ese diálogo entre dos instrumentos tan diferentes, entre un piano y una mandolina, ¿no se come uno al otro?

-(Chano) Mira, ese instrumento en manos de este señor, se convierte en algo enorme. Además, creo que su control es tan exhaustivo que le permite un virtuosismo tremendo. Es como un violín. Lo que para él es un espacio pequeño en el mástil para mí se convierte en distancias muy grandes. Él tiene todo muy cerca. Tiene ahí un mundo sonoro impresionante.

-(Hamilton) Además, por encima de todo, como tenemos un ritmo, un tempo muy común y próximo y el respeto es tan grande, el diálogo es muy fácil. Cada uno respeta la música del otro. No hay posibilidad de que nos tapemos.

-¿Tienen a veces la sensación de que la suma de influencias sea excesiva, que pueda distraer al oyente?

-(Chano) Para mí es al contrario. Me da mucha energía tocar con tantos músicos, estar en todas esas facetas. Cada uno te cuenta un discurso y con cada uno de ellos tocas diferente. Cuando te encuentras con músicos así estás adquiriendo conocimientos. Empapándote de cosas que te van a llenar. Al menos en mi caso.

-(Hamilton) Para mí, es un placer enorme tocar con un músico flamenco como Chano. Adoro el flamenco. Conocí esta música a través de Rafael Rabello, un gran guitarrista brasileño, muy amigo de Paco de Lucía. A partir de ahí conocí a todos. A Paco, a Vicente Amigo, Tomatito, José Mercé... cada vez que puedo intento tocar y aprender de ellos.

-Chano, tendrá que llevar a Hamilton a Cádiz para que toque con las comparsas y las chirigotas en el carnaval bueno de verdad, no como el de Río...

-Hombre, ya se lo he dicho. Le voy a llevar al barrio de La Viña. Ahí ves tú las chirigotas callejeras que no se presentan al concurso que son lo mejor. Eso es lo más auténtico.

-(Hamilton) Nada, (riendo) sin problema. Cambiamos. Un año aquí y otro allí...

-Menos mal que la situación ha dejado un poco de margen para poder empezar a hacer conciertos.

-(Chano) Estamos tan contentos y con tantas ganas de subirnos al escenario, con ganas de compartir... Estoy muy feliz de que Hamilton haya podido venir y podamos hacer estos recitales.