El Círculo Gijón cumple su sueño ante su afición

El premio gordo de la temporada acabó en manos del Círculo Gijón Noega Baloncesto. El perseguido y ansiado ascenso cristalizó en la matinal de este domingo en el Palacio de Deportes de Gijón y aupó a los cielos de Segunda FEB a los jugadores gijoneses. Broche de oro a una temporada en la que, salvo en tres ocasiones, todo fueron victorias para los geométricos. La última, la de este domingo frente al CB Aridane (90-79), que en su reverso iba acompañada de un billete nominativo para jugar la próxima campaña en la categoría superior.

Como en el resto de partidos de la Fase de Ascenso, fueron cuarenta minutos a brazo partido para superar a un rival que en absoluto lo puso fácil. Pero los jugadores de Nacho Galán, después de dominar de principio a fin, tenían el objetivo entre ceja y ceja y, tras vaciarse por completo y realizar un esfuerzo titánico, aguantaron el tipo ante las acometidas rivales y con mucha solvencia final cerraron a su favor un partido que desde ya es historia del club. Y para más inri, delante de su gente.

Las canastas a aro pasado fueron las protagonistas de los albores del encuentro. Un vigoroso mate de Octavi Fuentes (2-6) era usado por los canarios, que incluso podían escuchar los ánimos de su fiel grada dentro de la mayoría gijonesa, para marcar territorio. Sin embargo, ni mucho menos se dejaban intimidar los anfitriones, conscientes de lo que se jugaban ante su gente. Un triple de Salva Gallego ponía las tablas (8-8) y dos explosivas entradas a canasta de forma consecutiva de Eric Amandio hacían levantarse de la grada al público gijonés por primera vez (15-11). De aquí a final de cuarto, intercambio de ventajas y primer 'round' que caía del lado gijonés (18-13, fin 1Q).

En el segundo cuarto, pronto la grada enloquecía a golpe de triple. Primero uno de Hoexum subió los decibelios en el Palacio (31-24), los cuales, si cabe, aumentaron un poco más con el siguiente de Samu Barros (34-25), construyendo la primera ventaja importante de la contienda. Dicha ventaja se mantuvo prácticamente inalterable hasta el descanso, con un Salva Gallego dueño y señor del partido, que hacía las delicias de un público rendido ante él. Finalizaba la primera mitad con un triple tinerfeño sobre la bocina y desde más allá de nueve metros (41-33) que les mantenía con cierto oxígeno en el partido.

El tercer cuarto fue una nueva batalla sin cuartel. Toma y daca, nadie afloja y, en medio de todo, Eric Amandio se elevaba hasta el infinito y más allá para dejar una bandeja (50-39) que daba una ventaja de doble dígito y obligaba al tiempo muerto canario. Poco después, Salva Gallego seguía de dulce con un nuevo triple para su colección (55-44). No obstante, el rival se agarraba a esta final por el ascenso y con dos últimos minutos muy prometedores estrechaban el cerco hasta el 65-61 de final del periodo.

Diez minutos separaban al Círculo Gijón de la gloria y los locales se conjuraron para que nada pudiese entrometerse en su camino al ascenso. Defensas férreas, una serenidad ejemplar y el talento individual, que en momentos clave salía de las exquisitas manos de Salva Gallego o Samu Barros, actuaban como una barrera insuperable para la resistencia rival. Diferencias de 8-10 puntos absolutamente impertérritas hasta que a CB Aridane no le quedó otra que forzar las personales y tiros libres. Nada menos que 73 tiros libres en todo el encuentro, 45 para el Círculo, y manejo perfecto de la situación.

Y así, deshojando la margarita y restándose el tiempo al segundero, la bocina sonó, la grada estalló y el Círculo Gijón celebró. Final 90-79 y la apuesta por la fase de ascenso y la reivindicación de ser el mejor equipo de su grupo, eclosionaron en la realidad del ascenso.

El ascenso del Círculo Gijón Noega Baloncesto impulsa al baloncesto gijonés a recuperar la tercera categoría del baloncesto nacional y, aunque aún quedan lejos los tiempos de ACB del extinto Gijón Baloncesto, lo cierto es que este logro en cierto modo recuerda a aquel del que ahora se cumplan treinta años cuando, también conseguido en Gijón, como anfitriones, y ante un público entregado al equipo. Quien sabe si esta semilla común podrá desembocar en más altas cotas. Lo que si es una certeza es que es un rayo de ilusión y alegría para todo el equipo, su afición y su ciudad.

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