Los Reyes Magos pasan por Pumarín

Los Reyes Magos se adelantaron en Pumarín. «Melchor» Frey, «Gaspar» McDonnell y «Baltasar» Kabasélé lideraron el ímprobo esfuerzo del Unicaja Banco Oviedo para superar a un combativo Easycharger Palencia en el regreso de ambos equipos a la competición tras respectivos brotes de covid. Quizás no fue un encuentro demasiado vistoso, pero hay que valorar que tanto unos como otros venían de un prolongado periodo de inactividad. Además, la emoción no faltó en los 45 minutos en un nuevo enfrentamiento épico entre dos equipos destinados a encontrarse en el camino temporada tras temporada.

Ambos conjuntos comenzaron bastante pletóricos en el acierto de cara a canasta, pero la defensa ovetense apretó las clavijas, obligando al Palencia a efectuar varios malos lanzamientos. De todos modos, el marcador se mantenía de lo más igualado, con ventajas mínimas como mucho para unos y otros.

Sin Frey en la pista parecía que al Unicaja le costaba encontrar la fluidez en ataque. Speight, con acciones de mérito, abría hueco y la desventaja crecía hasta los 6 puntos (20-26). Frey fue el encargado de encontrar soluciones al atasco ofensivo de los ovetenses, intimidados por el larguísimo Bamba Fall. Afortunadamente Kamba aparecía para lograr una canasta llena de habilidad, mientras que el combativo McDonnell sacaba petróleo a la par que contagiaba a todos con su espíritu de lucha (30-29).

El segundo tiempo comenzaba con 4 puntos consecutivos del Palencia. El Oviedo intentaba hacerse fuerte bajo los aros, con los puntos de McDonnell y los rebotes de Kabasélé. Sin embargo, continuaba penalizando un ataque espeso en el que no entraban los triples. Parecía claro que el encuentro era de los se ganan o pierden en pequeños detalles en un día no pensado para florituras. Dos tiros libres de Arteaga, que celebrara su 39º cumpleaños, devolvían el mando en el marcador al Unicaja, pero Speight replicaba con un triple, contestado por otro de McDonnell directo al corazón. Kamba y Frey seguían ampliando el parcial ante la pájara defensiva de un Palencia que sufrió en sus carnes el gran final de tercer cuarto por parte del OCB (51-42).

El Unicaja comenzaba el cuarto definitivo con una renta favorable de 9 puntos, todo un lujo en un duelo en el que las ventajas amplias se cotizaban como el oro. Fue una lástima que el cuadro local desperdiciara algunos ataques, cuestión resuelta por Don Oliver Arteaga, sentando de nuevo cátedra para elevar la renta por encima de los psicológicos 10 puntos. El técnico visitante, Pedro Rivero, se vio obligado a solicitar un minuto de respiro, so pena de ver a su equipo asfixiado en un momento crucial.

Los palentinos comenzaron a recuperar terreno con una formación con muchos «bajitos», momento en el que llegaba una inoportuna antideportiva señalada a Mathieu Kamba. Blumbergs empataba la contienda, pero Arteaga lograba un mate para cortar el parcial de 0-11 encajado por la escuadra azul. Ya no había stop para un partido que tomaba la sexta marcha. Speight castigaba con un triple frontal y Frey empataba con un tiro libre. Un inmenso McDonnell volvía a encontrar el camino desde la línea de 3 puntos, pero seguía quedando mucho por jugar.

Lamentablemente Kamba seguía pecando de egoísmo y Xavier de desacierto, situación ideal para que Speight aprovechara para anotar otro triple. La conexión entre Frey y Kabasélé resultó providencial para que el Unicaja recuperase una ventaja mínima (63-61). El Palencia contaba con la inspiración de un maravilloso Speight, mientras Kamba seguía enamorado de sí mismo como la madrastra de Blancanieves con su espejito, condenando de paso a su equipo con sus pésimas decisiones, aunque rehízo su imagen con una canasta tras rebote ofensivo y un tapón sobre Allen ya en el último minuto del tiempo reglamentario. Palencia tuvo la última posesión, pero Speight falló el triple, por lo que el partido se iba a la prórroga.

Speight sumó la primera canasta de la prórroga, mientras un errático Kamba se dejaba tres tiros libres por el camino. Frey forzaba la cuarta personal de Speight y luego ponía por delante al OCB con una penetración resuelta con la zurda (70-69). Se abría el panorama para el Oviedo, más aun tras un triple fantástico del base noruego que cada partido hace oposiciones para sumarse al particular Olimpo que existe en Pumarín lleno de jugadores que han dado tardes de gloria a la afición ovetense (73-69).

Restaban 1:07 por jugar y el encuentro enloqueció. Blumbergs anotó rápidamente, pero aunque Kabasélé anotó 2 tiros libres, Ortega sumó un 2+1. La falta posterior sobre Frey la castigó Harald con dos aciertos desde la personal. Aún hubo que sufrir porque Blumbergs desperdició un triple totalmente liberado. Dos tiros libres de un bravo McDonnell sirvieron para desatar la euforia contenida y celebrar un triunfo con sabor especial. El Unicaja proseguirá este domingo en Lleida su particular maratón de enero con 7 partidos en tan solo 26 días.

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