Adrián González| Entrenador de L'Entregu

«Tenemos en la cabeza que este año ascendemos, nos la debe el destino»

–Al margen de lo que ocurra en esta eliminatoria, ¿cómo evalúa esta campaña?

–Ha sido una temporada que empezamos con un listón muy alto, porque veníamos de hacer lo mismo que estamos haciendo ahora. Pero, si estas situaciones no las repite ni el Lealtad, ni el Caudal ni estos equipos, que la repita un equipo como nosotros parecía muy difícil. Nos metimos en la Copa Federación y pagamos el cansancio. Sin salir de los seis primeros puestos, nos costó coger una racha buena.

–En la segunda vuelta todo cambió.

–Coincidió con las cesiones por parte del Oviedo de Pereke y Nico Pereira. Solo nos superó el Llanera, que estuvo intratable. Ha sido una temporada estupenda.

–¿Fueron las cesiones lo que provocó el cambio?

–Fueron importantes, nos dieron un salto de calidad. Además, coincidió en que varios jugadores cogieron su mejor momento de forma. En la primera las alineaciones y los cambios venían un poco dados. La llegada de estos jugadores apretó un poco a todos.

–Acabaron la Liga regular en un gran estado de forma.

–El Lealtad acabó muy bien, pero nosotros acabamos un punto por encima de todos, nos veían como favoritos en el 'play off'. Para mí era el Sporting Atlético, que tiene ese plus, pero hicimos esa hombrada en Mareo y nos dio para llegar hasta aquí.

–¿Acabar tan bien es una cuestión más física o mental?

–El trabajo de Luis, nuestro preparador físico, es sensacional, llevo con él seis años y siempre acabamos bien la segunda vuelta. Pero también hay un factor emocional. En una eliminatoria como la que tuvimos contra el Lealtad, en el primer partido parecíamos unos bólidos y en los últimos veinte minutos en Les Caleyes parecía que nos llegaba la lengua al suelo. Cabeza y piernas están muy conectados.

–¿Qué supuso la remontada en Mareo?

–Ese es el momento más grande para el club y los jugadores. Es Mareo, son el espejo para todos. La eliminatoria nos hacía ilusión, pero un 2-0 y remontar a 2-3 fue una alegría inmensa. Solo hay un broche que mejore eso y es el ascenso.

–Los filiales suelen ser peligrosos. ¿Qué espera del Mallorca B?

–Suelen ser los mejores equipos. Son gente muy joven, algún jugador con dinámica de Primera, que juega muy rápido. La final allí será una maratón. Pero nunca se sabe cuál es el rival bueno. Ya tuvimos la experiencia del Sporting Atlético, es cierto que con la pizca de suerte que hay que tener, pero conseguimos eliminarlo. No veo tantas diferencias entre las dos canteras. Si pudimos una vez, porqué no otra.

–¿Cuáles son las fortalezas de su rival?

–El ritmo competitivo y la calidad. Tienen una circulación de balón muy alta y una condición física excepcional. Nosotros no somos profesionales. Si hay que apuntar una debilidad, la inexperiencia y que tienen más presión que nosotros. Un filial de Primera a priori no se puede permitir estar en Tercera. Para nosotros, que venimos a intentar subir, tampoco pasaría nada si no se consigue, más allá de la frustración. La libertad mental juega a nuestro favor.

–El año pasado se quedaron a las puertas del ascenso. ¿Qué aprendieron?

–Lo primero, que los equipos asturianos no son tan malos. Competimos con un equipo con mucho más potencial económico y casi les damos el susto. Aprendimos a tener esa confianza, a que si se llega aquí es por algo. Y que jugar en casa o fuera no tiene tanta incidencia.

–¿Tiene mejor plantilla que el año pasado?

–Es más compensada, el año pasado llegamos muy justos al final, con varias bajas y un once muy repetido. Ahora llegamos con dudas para formar el equipo y con opciones en el banquillo. En una eliminatoria como esta es determinante la gente que salga desde el banquillo.

–Benditas dudas.

–Siempre las quiero tener. La cabeza está más limpia cuando el once está más aseado, pero para dar más debe haber competencia.

–¿Cómo está la plantilla de moral?

–Con la idea en la cabeza de que este año va a ser el del ascenso. Nos la debe el destino.

–Lleva tres temporadas con L'Entregu. ¿Va a seguir?

–La decisión está tomada y lo saben en el club. Ahora quiero centrarme en el 'play off'.

–Entonces, ¿se va?

–No voy a seguir. Es un ciclo muy bueno, pero hablaremos más cuando acabe la temporada.

–¿Ya tiene equipo?

–Lo hablaremos cuando acabe la temporada.

–¿Cuáles son sus expectativas en el fútbol?

–Poder llegar a disfrutar al menos un año de manera profesional. Todos los que estamos en este mundo tenemos nuestro trabajo y sin la ayuda de la familia es imposible. Está la aspiración de dedicarse al menos un año al fútbol y disfrutar de la familia.

–¿Qué tendría que pasar para que dejase de ser enfermero de la UCI en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) y se dedicase solo al fútbol?

–Me gusta mucho mi trabajo, aunque con una excedencia podría volver. Tendrían que cumplirse los mismos condicionantes que con mi trabajo actual. Si quiero ser profesional tendría que ser al mismo precio, en lo profesional, lo personal y lo familiar.