El Lealtad cae derrotado en Getxo tras realizar una mala segunda parte

En su primera visita de la historia a Gobela, el Lealtad sufrió su quinta derrota de la temporada (3-1). Los maliayos, que se adelantaron con un gran tanto de Medori, habían avisado previamente con un remate de Omar al larguero, pero se durmieron en los inicios de la segunda mitad y lo pagaron con la derrota. Por contra, el Arenas de Getxo supo esperar los errores de los de Villaviciosa y sentenció en unos pletóricos segundos 45 minutos, para así conseguir enlazar dos victorias consecutivas.

El técnico asturiano, Roberto Aguirre, sacó un once con Álex y Fassani como novedades, respecto a la jornada anterior. Con Mendi en el mediocentro, ayudado en ocasiones por Rodri, intentaba frenar a los veloces rojinegros, que inquietaron mucho durante los primeros minutos.

Los de Bolo empujaban y el guardameta Tejero ejerció de salvador de los suyos en dos buenas oportunidades de los locales. Dani López, a los seis minutos de juego, le entregaba mansamente la pelota y cuatro minutos después Joxa Vidal remató de cabeza para que el guardameta asturiano realizara otra gran intervención.

La presión y robos de los areneros les permitió generar otra ocasión al rematar Luisma Villa, de chilena. Tejero se encargó de despejar, como un portero de balonmano, con un pie a córner.

Tras estos sustos, el equipo maliayo dio un paso adelante. Empezó a llegar con más asiduidad a la portería de Txemi. Primero lo intentó Borja Íñiguez con un remate desde 25 metros que se le fue muy alto. Salió incluso del campo, porque tras las porterías no hay tribunas.

Sin embargo, tras botar el único córner del partido a favor de los de Villaviciosa, el central Omar envió con la testa la pelota al larguero. Un minuto después, en una contra, Medori cruzó un disparo raso desde la media luna del área rival y el esférico, tras tocar en el palo, entró con fuerza en las redes locales. Los de Bolo reaccionaron tras el tanto asturiano, pero la defensa y Tejero seguían muy serios y evitaron que las internadas de Ramos y Jonxa Vidal igualaran el encuentro.

Tras la reanudación, el decorado cambió radicalmente. Quizás ni hubiera ocurrido si Borja Íñiguez no encuentra a Txemi al rematar un balón que paró el meta. Pero la historia fue distinta y en 180 segundos el Arenas dio la vuelta al marcador.

El 'Chino' Uranga -pues su madre es de Macao- y Cabero dieron la vuelta al partido y, aunque Aguirre movió el banquillo para serenar a su equipo, los rojinegros estaban imparables en estos frenéticos minutos. La guinda la puso Aitor Ramos y la diferencia ya se hizo muy grande para que los del Principado regresaran con algún botín.