El Lealtad sigue en caída libre a pesar de su voluntariedad

Segunda derrota consecutiva del Lealtad este domingo en Vitoria por 3-0 en un partido ante un rival directo y marcado por el viento enorme en plena ciclogénesis sufrida en Álava este fin de semana. El equipo que lo tenía en contra tenía muchas dificultades en sacar la pelota y el que lo tenía a favor, llegaba al área contraria con mucha facilidad.

A pesar de la dificultad, el Lealtad empezó mucho mejor, sobre todo, entrando por las bandas. En el minuto 12, Fassani profundizaba sobre Jorge y su centro al área fue rematado por Montero que salvaba con la mano izquierda Areitio despejando el peligro. Los asturianos dominaron en el inicio del encuentro. De hecho, no aparecieron los vitorianos en la primera media hora. Despertaron después de una jugada embarullada de corner en contra que fue rematado por Mendi en primera instancia y que Fassani no pudo llegar al rechace para anotar el 0-1.

Pero los de Villaviciosa perdonaron y lo pagaron. Tanto es así que, en el minuto 34, una jugada por banda derecha de Cipetic terminaba con un servicio al área donde Obieta en plancha se apuntaba el 1-0 en la primera llegada vasca del partido. Con el viento a favor, el filial armero se vino arriba y pudo incrementar diferencias antes del descanso. La mejor ocasión fue de Escoruela en el minuto 42 cuando se marchó desde el centro del campo, y en diagonal, de tres contrarios para cruzar en demasía sobre la portería adversaria.

A pesar de ir por detrás en el marcador, la segunda parte se presentaba halagüeña con las condiciones meteorológicas a favor. Podría haber cambiado el guión si, tras la reanudación, Mendi, en un balón suelto, hubiera encontrado su objetivo en un remate a puerta bien ejecutado que se topó con un contrincante bien situado. No pudo ser, y pocos minutos después, en el 63, el Vitoria encarrilaba su victoria en un penalti claro de Carbonell que transformó Moreno ajustando a la derecha de Tejero tocando incluso en el plano.

Con el 2-0 en contra y sin nada ya que perder, el Lealtad arriesgó poniendo en liza a tres defensas. En el minuto 72, Robert Martínez protagonizó una gran acción por la banda izquierda y su centro peligroso fue repelido por un defensa contrario de forma providencial. Sin embargo, se volvió a repetir la misma historia, a la mínima esperanza le sucedió el batacazo. Esta vez en forma de sentencia. Dos minutos después un centro aislado desde la banda izquierda que Tejero se equivocó al blocar sirviéndosela en bandeja a Obieta que no perdonó el 3-0.

Ni tan siquiera hubo fortuna en el tanto del honor. En el minuto 81, los asturianos gozaron de su mejor ocasión de la mañana. Falta al borde del área en la que Omar lograba que el esférico se estrellase en el palo derecho. En el rechace, Mendi solo tenía que empujar a gol pero la pegó con tan mala fortuna que su compañero Cueto sería el encargado de despejar a corner. Surrealismo en una acción tan desastrosa como la racha actual que le ha llevado a ocupar lugares de descenso. Nueve partidos sin conocer el triunfo desde que el 15 de octubre el Lealtad venciese al Real Unión.