Borrar
Tokio 2020 | Atletismo: Ana Peleteiro: «Este bronce me va a cambiar la vida para siempre»
Tokio 2020 | Atletismo

Ana Peleteiro: «Este bronce me va a cambiar la vida para siempre»

La saltadora gallega se convierte en la tercera atleta española en ganar una medalla olímpica tras un espectacular concurso con dos plusmarcas de España incluidas y récord del mundo de Yulimar Rojas

Igor Barcia

Enviado especial a Tokio

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Domingo, 1 de agosto 2021

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El sueño era lograr una medalla en los Juegos de Tokio. Costase lo que costase. Y Ana Peleteiro (Riveira, La Coruña, 2 de diciembre de 1995) lo dio todo por su objetivo. En una de las mejores finales de triple salto que se recuerdan, con Yulimar Rojas superando el récord del mundo de Inesa Kravets y dejando la marca en 15,67 metros, con la portuguesa Patricia Mamona batiendo la mejor marca europea para hacerse con la plata... Y con la gallega superando en dos ocasiones el mejor registro español para morder el bronce por tres centímetros de ventaja frente a la jamaicana Jam Rickets.

Quizá por ello que tras el paso por el podio Peleteiro estaba tan pletórica por el premio como agotada por el esfuerzo de la final. «Iván Pedroso (el mítico saltador cubano que ahora le entrena a ella y a Yulimar) me dijo antes de la final que veníamos a por medalla, que era el objetivo y que daba igual lo que hubiera que saltar», confesaba la saltadora. Tuvo que irse hasta los 14,87 en la arena del Estadio Olímpico de Tokio para celebrar ese bronce que le sabe a gloria. Peleteiro entra ya en el olimpo del atletismo español, tercera mujer en colgarse una presea -tras María Vasco y Ruth Beitia-, y confirma lo que se sabía desde que tenía 16 años, que esta gallega tiene un talento innato que Pedroso ha sabido pulir.

-¿Cómo se siente después de lograr el bronce?

-Hay que vivirlo para saber lo que se siente. Tener la suerte de ser una de las personas que puede disfrutar de una medalla es brutal. Miraba la medalla, el estadio, y me acordé de un mensaje que me mandó antes de la prueba mi padre, «el sufrimiento es temporal y la gloria es eterna». Me acordé de ello y me eché a llorar.

-Fue una final muy igualada, tres centímetros de diferencia entre el bronce y el cuarto puesto.

-Ha sido una final apretadísima. Hemos saltado muchísimo y es una medalla merecida, pero he tenido que pelear mucho. He dudado, me he visto fuera, me he visto dentro... Es una competición muy dura y hay que creer mucho y visualizar mucho para estar ahí. Es lo que he tratado de hacer, bajar las pulsaciones y no excederme en la motivación. Estoy superfeliz, no me lo creo.

-Ha tenido que batir dos veces el récord de España para llegar al bronce.

-De lo último que me acordé fue del récord. Pedroso me dijo que veníamos a por la medalla, y que daba igual lo que hubiera que saltar.

-Ya que menciona a Iván Pedroso, ¿qué importancia tiene en su éxito?

-Él confió en mí, me sacó de la mierda, era una niña que pesaba 65 kilos, que era un talento pero un juguete roto. Me agarró y me dijo que íbamos a hacer algo grande juntos, que no sabía en cuánto tiempo, pero que lo haríamos, y ha llegado.

-¿Y Yulimar, la nueva plusmarquista mundial?

-Tengo mucho cariño a Yuli, si estoy aquí es gracias a entrenar con ella. Si no llega a venir a Guadalajara, no sería la deportista que soy hoy. Además creo que su esfuerzo engrandece mi medalla.

-Se ha quedado a un paso de la barrera de los 15 metros. ¿Es un nuevo objetivo?

-No pienses que me voy plenamente satisfecha, pero eso me alegra porque me sirve para tener un nuevo reto y seguir mejorando como deportista y como persona, porque esto no se te puede subir a la cabeza. No alcanzar el sueño por completo es lo mejor que me puede pasar porque me queda al menos una cosa más que hacer. Pero estoy muy contenta.

-¿Toca ahora un premio después de este éxito?

-Me merezco unas vacaciones, el cuerpo está al límite, me duele todo, y no iré a competir a la Diamond League porque el sistema de competición es una mierda y no me interesa.

-¿Cree que este bronce le va a cambiar la vida?

-Yo creo que sí, le dije a Fátima Diame, mi compañera de apartamento, que si lo hacía bien me podía cambiar la vida para siempre. Ojalá la gente lo haya vivido con la misma intensidad que yo y hayan podido disfrutar, el matyor regalo es que la gente disfrute y se enganche a este deporte.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios