Arcelor apura los plazos para contar con un nuevo ERTE con la división de largos parada
El 31 de diciembre decae el expediente de regulación actual y la negociación apenas ha avanzado
La negociación del nuevo expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que Arcelor plantea para buena parte de su plantilla en España, ... el grueso en Asturias, no será un mero trámite. A pesar de que desde 2009 prácticamente siempre ha estado activa esta herramienta que dota de flexibilidad a la empresa ante posibles paradas o reducciones de producción, tras dos reuniones apenas hay avances. Los sindicatos exigen más información y argumentos más sólidos sobre la necesidad real de aprobar otro ERTE, para el que, según censuran, se utilizan argumentos repetitivos que podrían emplearse en cualquier otro tipo de empresa. La cuestión es que el próximo día 31 perderá vigencia el actual y lo hará con la división de largos casi parada en su totalidad –están detenidos la acería y los trenes de carril y alambrón– y más de 400 trabajadores afectados por estas medidas. No obstante, los operarios pueden acogerse a otras soluciones antes que la regulación, como la realización de reconocimientos médicos o disfrutar de licencias y vacaciones.
La empresa está dispuesta a mantener las condiciones del actual ERTE, que son las que se han solido repetir desde 2009: compensación de hasta el 90% de las retribuciones brutas que le corresponderían a los empleados afectados trabajando su jornada ordinaria, así como el 100% de las pagas extraordinarias y el disfrute íntegro de los días de vacaciones. Sin embargo, pretende aumentar los porcentajes de afectación, que en la actualidad estaban en el 15% para las instalaciones de la región.
El actual ERTE ya estaba activo sin el acuerdo de los representantes de los trabajadores. Arcelor prorrogó a finales del año pasado el que había acordado solo por tres meses con los sindicatos. Entonces anunció su continuidad «ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo» y «la pervivencia de las causas que fundamentaron la aplicación».
Se prevé que el ERTE pueda afectar a 6.600 trabajadores de las plantas de Gijón y Avilés, las de Lesaca (Navarra), Echévarri (Vizcaya) y Sagunto (Valencia), así como en los centros de distribución del grupo y en AMDS Processing (el negocio dedicado a procesar productos planos al carbono en función de las necesidades de los clientes). La comisión negociadora está formada por seis representantes de UGT, cuatro de CC OO, dos de ELA y uno de USO.
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