El incendio en Arcelor deja inutilizado el horno alto 'A' de la planta de Gijón
El accidente provocó una intensa humareda y, aunque no hubo daños personales, los materiales son de enorme magnitud
Arcelor tuvo que evacuar en la tarde del miércoles el horno alto 'A' de su planta de Gijón, tras una «reacción interna» que provocó un incendio y una intensa humareda en la instalación. Según pudo saber EL COMERCIO, se produjo una perforación en la parte baja del equipamiento industrial y llegó a salir arrabio por la tobera. Algunas fuentes apuntan a una posible perforación del crisol, aunque desde la multinacional aseguran que aún no se puede valorar este extremo y que habrá que esperar a poder comprobar los daños. Por precaución, se valoró detener el 'B', que ya funciona normalmente.
Desde la compañía se explicó que durante una parada de la instalación, a las 17.50 horas, tuvo lugar «una desestabilización del proceso», que derivó en una «reacción interna». La compañía comunicó el accidente al 112, al Ayuntamiento de Gijón y al Principado. El fuego fue extinguido con el propio equipo de bomberos de la factoría, aunque estuvieron en prealerta los servicios de salvamento y de prevención y extinción municipales. La nube de humo llegó a la zona oeste de Gijón y fue visible desde buena parte de la ciudad. No hubo daños personales.
Aunque aún no se pueden evaluar los daños, el horno alto 'A' ha quedado inutilizado, al menos momentaneamente. Su vida útil finalizaba el año que viene, aunque la idea era estirarla lo máximo posible para poder acometer el proceso de descarbonización de la instalación. De hecho, se habían realizado catas en el crisol que apuntaban a que se encontraba en mejores condiciones de lo previsto y que podría durar incluso hasta 2026, para dar tiempo a la puesta en marcha de la acería eléctrica, la planta de reducción directa del mineral de hierro e incluso a la llegada de las primeras moléculas de hidrógeno. Ahora se complica esa prolongación. El horno se arrancó en febrero, tras haberse detenido el pasado mes de septiembre por baja demanda.
El crisol es el corazón del horno alto, su parte baja, en el que se introduce mineral de hierro, el sínter y el cok (carbón destilado), y en él se adquieren altas temperaturas mediante una inyección de aire caliente para producir el arrabio.
«Se escucharon dos explosiones»
El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha mostrado su «apoyo a los trabajadores, a la empresa y a su dirección», con quien mantiene contacto «permanente para conocer la gravedad del incendio». «Me transmiten que no hay daños personales y que tienen que evaluar los daños materiales», ha manifestado el líder regional.
La explosión se ha sentido en los alrededores de la instalación, particularmente en los barrios de la zona oeste de Gijón y en las inmediaciones de la ciudad, como en Carreño. «Parece que hubo un bombazo y que hubo movida», acertó a decir el presidente de la asociación vecinal de Veriña, José Luis Nicieza.
El ruido también se escuchó desde varias localidades del concejo de Carreño. Aunque la cercanía de las dos factorías de ArcelorMittal, la de Veriña y la acería LD-III de Tabaza, les tiene acostumbrados a emisiones y, en ocasiones, explosiones, en esta el estruendo les hizo pensar en algo más grave. «Se escucharon dos explosiones y rápidamente una sirena», aseguró a este periódico Aurora Fernández. «Acababa de estar al lado del horno, cuando me iba escuché la explosión, miré hacia atrás y ya vi las llamas. Me subí rápidamente en el camión y me alejé de la zona», dice un vecino de la zona.