Ciencia y Transición ponen el foco de sus cuentas en la I+D y la inversión productiva
Sánchez destaca su apuesta por un tejido económico basado en el conocimiento y Roqueñí, el peso de las políticas de gestión del agua
Contar con «un tejido económico más diverso, competitivo, innovador y resiliente» y, a la vez, más descarbonizado y sostenible. Estos son los objetivos de las ... consejerías de Ciencia, Empresas, Formación y Empleo y de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico que, en sus presupuestos para 2025, ponen el foco en la inversión productiva y en la innovación para avanzar en esa dirección, según expresaron sus máximos responsables, este lunes, en la presentación de sus respectivas cuentas.
La primera contará con 449 millones para el año que viene, un 4% más. La mayor cuantía se destinará al programa de universidades (189 millones), sobre todo, destinados a la Universidad de Oviedo. 158,1 serán para el área de trabajo, en la que se incluyen las políticas de empleo; el programa de I+D+i tendrá una dotación de 65 millones, un 22% más –20 millones irán al impulso de la innovación empresarial–, y a la Dirección General de Empresa se le asignan 17,5, orientados a fomentar el autoempleo, el emprendimiento y la economía social, así como la creación y consolidación de compañías y la atracción de inversiones. Además, se prevén 7,7 para telecomunicaciones y 7,1 para la planificación de Formación Profesional.
No obstante, más allá de las grandes magnitudes, el consejero Borja Sánchez, sobre todo, puso el foco en la consolidación de un tejido productivo basado en la sociedad del conocimiento, capaz de generar empresas y atraer nuevas industrias, sobre todo, en el ámbito de la transformación digital, el espacio, el sector agroalimentario, la salud y la alta tecnología.
En esta línea, destacó algunos proyectos. Se impulsará un centro tecnológico de referencia para dar apoyo a las pymes e impulsar la transferencia de la innovación al mercado. Tendrá dos millones asignados y será una iniciativa público-privada que facilite la innovación empresarial y sirva de motor para la creación de nuevas compañías. Además, se impulsará la compra pública precomercial, con una partida inicial de 1,1 millones, para desarrollar dos bancos de pruebas para nanosatélites y motores de cohetes. El antiguo edificio del IPLA, en Villaviciosa, se convertirá en una incubadora para compañías innovadoras del ámbito agroalimentario de la mano del Serida (300.000 euros). Se desarrollará una incubadora de alta tecnología en ciencias de la vida en el Vivarium de Oviedo (un millón de euros); el polo para la creación y desarrollo de empresas de base tecnológica de Valliniello (Avilés) tendrá una dotación de 4 millones y el polo de innovación del pozo Carrio (Laviana) contará con 2,1 millones para transformarse en un centro de innovación orientado a la sostenibilidad y la agroalimentación del futuro. Además, en Aller, en el pozo San Jorge, con dos millones de euros, se instalará un centro de almacenamiento y procesamiento de datos, mientras que al Santiago se destinarán 100.000 euros para estudiar la viabilidad de un laboratorio subterráneo entrado en la habitabilidad de la Luna. Por otro lado, la Agencia Sekuens recoge 300.000 euros para el desarrollo de proyectos colaborativos tecnológicos en el edificio Mar Cantábrico, en Luarca.
Gestión del agua
Por su parte, en el caso de Transición, con un presupuesto de 297 millones de euros, la consejera, Nieves Roqueñí destacó cuatro ejes de trabajo: la extensión de las infraestructuras de saneamiento y depuración y el refuerzo del abastecimiento del agua con la digitalización de la gestión del ciclo; el apoyo a los ayuntamientos para impulsar las recogidas separadas de residuos y su tratamiento, así como la economía circular; el impulso a la descarbonización y la inversión empresarial en esta materia, y el refuerzo de las políticas de apoyo al comercio minorista. «206 millones se dedican a la inversión alrededor del 70% de los créditos disponibles», subrayó la consejera Nieves Roqueñí que, sobre todo, apuntó que el gran capítulo para el próximo año lo conforman las políticas de gestión del agua, que movilizarán 46,5 millones, con cerca de 100 actuaciones en 56 de los 78 municipios asturianos
En el capítulo de saneamiento, el proyecto reserva 1,6 millones para la culminación de las obras de Aller y partidas para financiar diferentes proyectos, como los de La Espina (Salas), Mestas de Con (Cangas de Onís), Langreo (río Montes), Laviana (Gozón), Cespedera (Carreño), Castañéu (Grado), así como la reparación de la depuradora de Ardisana, en Llanes. Además, se iniciará la primera actuación para aprovechar el agua subterránea del acuífero de Guadamía, en Ribadesella. También se avanzará en los planes para prevenir inundaciones en Parres y se actuará sobre la senda del puente romano de Colloto con el fin de afrontar posibles crecidas del río Nora.
En este campo, se reservan 5,3 millones para la transformación de la depuradora de Villaperi (Oviedo), que se prevé que abastezca de agua a la industria y está prevista la licitación de una planta para generar metano a partir de fangos. 4,7 millones se destinarán a finalizar una plataforma autonómica de gestión y desarrollar una aplicación específica para los municipios que facilite la instalación de contadores digitales. Se ubicará en el nuevo Edificio del Agua, en la antigua fábrica de El Águila Negra, en Colloto. En 2025 se iniciará su adecuación.
Están previstos también ocho millones de euros para apoyar a los ayuntamientos en la gestión de residuos. Como novedad, habrá una nueva línea de ayudas de 1,5 millones para instalar contenedores soterrados y otras dotaciones. Asimismo, se transferirán 13 millones a Cogersa para crear una instalación de triaje, ampliar la planta de biometanización y habilitar minipuntos limpios en los concejos.
Por otro lado, se transmitirán 19,26 millones a la Agencia Sekuens para subvenciones destinadas a la inversión productiva y el apoyo a la industria. Al tiempo, se lanzarán nuevas líneas para proyectos tractores de diversificación, dirigidas tanto a pymes como grandes empresas, con cargo al Fondo de Transición Justa (FTJ), con 8,55 millones.
Asimismo, se aumentarán las ayudas a la eficiencia y las energías renovables (2,5 millones, un millón más); se duplicarán los fondos para la promoción de comunidades energéticas y se prevé finalizar las restauraciones mineras de Arlós (Llanera) y Pozo Espinos (Mieres), continuar con las grandes obras en marcha en el suroccidente e iniciar las actuaciones en las escombreras de Moreda y Caborana (Aller) y en la mina y escombreras del Terronal (Mieres).
Por otro lado, se pondrán en marcha a nivel autonómico los programas de sostenibilidad y relevo generacional en el sector del comercio (450.000 euros); se destinarán 350.000 euros al impulso a la digitalización y se reforzará el programa Bonos Comercio Asturias.
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