

Secciones
Servicios
Destacamos
Escribano Mechanical and Engineering (EM&E) prevé incrementar sensiblemente su plantilla en los próximos años al calor del incremento del gasto en defensa auspiciado por ... el plan de rearme de la Unión Europea . En concreto, la compañía tiene entre sus planes pasar de los 1.247 empleados que tenía a finales de 2024 a 3.099 trabajadores en 2030 –1.852 más–, lo que supondría multiplicar por 2,5 el número de empleados. Así se desprende del plan estratégico elaborado por la compañía al que ha tenido acceso 'Abc', diario del grupo Vocento, en el que se integra también EL COMERCIO.
Asimismo, Escribano estima un incremento de las ventas hasta alcanzar los 1.300 millones de euros dentro de un lustro; es decir, tres veces la facturación de 2024. Para este año, la previsión es cerrar con unos ingresos de 469 millones, un 13% por encima de lo registrado el pasado. Además, prevé en estos cinco ejercicios inversiones en maquinaria por unos 180 millones para aumentar sus capacidades en sus centros españoles, incluido el de Asturias.
En ese sentido, la compañía ya ha iniciado el proceso de ampliación del centro de investigación y desarrollo que puso en marcha en diciembre del año pasado en La Curtidora, en Avilés. Unas instalaciones que actualmente cuentan con una plantilla de una decena de ingenieros, pero la intención de Escribano es contratar a otros «treinta o cincuenta» antes de finales de 2026. Es decir, podría multiplicar por cinco el personal.
En paralelo, tiene previsto implantar en Asturias un nuevo centro de producción que asuma parte de las tareas de fabricación de los contratos de defensa en los que está inmersa y que incluyen más de una veintena de países. La inversión rozará los 50 millones de euros y se desconoce cuántos puestos de trabajo generará, pero el presidente de la compañía, Javier Escribano, anunció a finales del pasado mes de febrero que el nuevo centro podría llegar en un plazo de «un año y medio o dos años». Precisamente, el plan estratégico recoge que el grueso de las contrataciones se destinará al equipo de producción, por lo que la futura nueva planta asturiana entraría dentro de esas previsiones para el próximo lustro.
Sin embargo, la presencia de EM&E en la región no se limita a esas dos instalaciones, sino que además participa en el consorcio Tess Defence, liderado por Indra, y del que también forman parte Santa Bárbara Sistemas y Sapa. Esta alianza empresarial levantará en el Principado –en una ubicación aún por determinar– un centro industrial ligado a los megaprogramas del Vehículo de Combate sobre Ruedas (VCR) 8x8 Dragón –que se ensambla en Trubia, donde también se fabrican las barcazas– y al nuevo Vehículo de Apoyo a Cadenas (VAC) –que el Ministerio de Defensa quiere adjudicar al consorcio en un futuro cercano–. Ambos contratos suman casi 5.000 millones de euros de inversión por parte del Gobierno.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Hallan muerta a la mujer que se cayó ebria estando con un bebé de 1 año a su cargo
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.