Una transición energética justa, la formación y la variante, las tres prioridades empresariales

La empresa «como columna vertebral» de la economía. Con esta premisa, la vicepresidenta de la Federación Asturiana de Empresarios (Fade), María Calvo, y el asesor jurídico de la organización, Javier García, desgranaron ayer cuáles son las prioridades de la patronal asturiana entre las 22 medidas «ineludibles» que ambos presentaron ya en noviembre, pero que ahora ordenan mediante un criterio de necesidad y apremio, porque hay algunas acciones «para las que el tiempo se acaba», aseguraron.

La transición y el marco energético es una de esas acciones críticas que se deben abordar «con urgencia y liderazgo», apuntaron, para lo que reclamaron analizar el impacto que tendrá la descarbonización y la necesidad de buscar que esta sea neutra con la competitividad y atienda a las particularidades de Asturias, entre ellas el peso de su industria electrointensiva.

Disponer de un estatuto para los consumidores electrointensivos estable y competitivo y con una dotación económica suficiente es una de sus reclamaciones en este epígrafe, así como poner el foco en los sectores difusos -residencial y tráfico- para sustituir la energía térmica por otras limpias e impulsar inversiones en materia de promoción de la eficiencia energética combinadas con consensos en materia de fiscalidad ambiental y compensaciones 'antidumping' para evitar la actual competencia en desigualdad de condiciones por los derechos de emisión de CO2, que sí paga la industria comunitaria y no la de países de fuera de la UE.

El segundo punto que Fade considera prioritario para garantizar el futuro de sus 68.700 empresas, responsables del 87% del PIB de la región, es la formación para el empleo, ante la dificultad de encontrar los perfiles laborales que las empresas necesitan. Así, recordaron que en los últimos cinco años en España han dejado de estar activas 58.500 personas, de las que casi la mitad (27.000) eran asturianas, mientras que el 55% de las compañías tienen dificultades a la hora de encontrar candidatos.

Ante este panorama, Calvo y García reclamaron la creación de un «radar» de las necesidades formativas, una herramienta ágil, eficaz y gestionada por las propias empresas, que permita detectar los perfiles más demandados y conocer con precisión los desajustes. Además, la patronal asturiana pidió mirarse en el espejo vasco, adoptar su modelo de FP Dual para luchar contra la falta de relevo generacional y ayudar al ajuste entre demanda y oferta, un sistema experimental, con más horas de estancia en la empresa que sea atractivo para las compañías y los alumnos. Otro epígrafe de este punto apuesta por trasladar este sistema mixto a la universidad, en lo que sería «uno de los hitos en los que avanzar» y en el que, de nuevo, se pone como ejemplo el buen hacer del País Vasco. Este modelo, señala Fade, debería ser implantado «de forma muy gradual», pero no de forma lenta.

La creación de una Viceconsejería de Formación Profesional y cambiar el sistema de orientación profesional para llevarlo a todas las etapas del sistema educativo son otras de las reclamaciones de los empresarios asturianos.

La tercera prioridad ineludible en el corto plazo tiene que ver con la conectividad ferroviaria de alta velocidad, con la petición de que se despejen las dudas y calendarios de la variante de Pajares, tanto para pasajeros como mercancías, de tal forma que se tenga una ejecución real y ágil de una infraestructura «decisiva para muchos sectores».

Estas son las tres medidas que destaca la patronal, pero no son ni mucho menos las únicas. Además, los responsables de Fade pidieron un mayor esfuerzo para que los jóvenes opten por las conocidas como habilidades STEM, las siglas en inglés que corresponden a ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas; también reforzar el programa bilingüe; promover las competencias emprendedoras desde el aula y fomentar la igualdad de oportunidades en la empresa.

Por otro lado, entre su listado de medidas para llevar a cabo incluyen que se convierta el área metropolitana de Asturias en un eje de desarrollo económico, resolver el déficit de infraestructuras; mejorar la conectividad, tanto aérea como ferroviaria y recuperar la autopista del mar; y avanzar en la conectividad digital rural y en polígonos industriales.

El desarrollo de una Asturias más competitiva requiere, la eliminación de la discriminación fiscal de la región, a la vez que reforzar el sistema de ciencia, tecnología e innovación y una administración más ágil y simplificada en la que se eliminen las barreras al crecimiento de las compañías son otras de sus demandas.