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Trabajadores del último relieve del pozo Carrio, en Laviana, que cerró el pasado 28 de diciembre. J. C ROMÁN
El Gobierno destinará 422 millones para paliar el cierre de las minas y las térmicas

El Gobierno destinará 422 millones para paliar el cierre de las minas y las térmicas

El carbón quedará fuera del mix energético en 2030 como máximo, la misma fecha en la que cesarán su actividad las centrales

PALOMA LAMADRID

Sábado, 23 de febrero 2019, 03:25

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El carbón quedará fuera del mix energético -la combinación de fuentes de las que se abastece un territorio- en 2030, la misma fecha tope en la que cesarán su actividad las centrales térmicas. Para paliar su impacto, el Gobierno destinará 422 millones de euros a las comarcas afectadas. Así lo establece el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030, una de las tres patas del Marco Estratégico de Energía y Clima aprobado ayer por el Consejo de Ministros, que se completa con el anteproyecto de ley de Cambio Climático y Transición Energética y la Estrategia de Transición Justa. Se trata de la hoja de ruta para lograr la descarbonización de la economía en 2050 y convertir así a España en un país neutro en emisiones de CO2 dentro de tres décadas.

Según el documento, «las centrales de carbón cesarán de aportar energía al sistema como tarde en 2030, ya que tendrán serias dificultades para ser competitivas frente a otras tecnologías en un entorno muy condicionado por la respuesta europea al cambio climático, en el que el coste del CO2 tenderá a ser cada vez más elevado». No obstante, el plan promovido por el Ministerio de Transición Ecológica no descarta que se mantenga parte de la potencia instalada en las térmicas donde se hayan acometido las inversiones necesarias para cumplir con el marco comunitario. En concreto, se deja una horquilla de hasta mil megavatios (Mw) para acompasar el proceso de transición en las zonas afectadas. Todas las instalaciones se encuentran en un proceso próximo al cierre: de las catorce térmicas en funcionamiento, nueve cerrarán en 2020.

Lada y Soto de la Barca

Entre ellas, las de Lada y Soto de la Barca, ya que Iberdrola y Naturgy -las empresas propietarias- decidieron no realizar las mejoras requeridas para reducir las emisiones contaminantes y, de hecho, presentaron las solicitudes de cierre ante el Gobierno central. Las cinco térmicas restantes, entre las que figuran las de Aboño y Soto de Ribera, se irán adaptando «a un proceso de salida». Asimismo, en esa reconversión del mix energético, el ministerio que dirige Teresa Ribera aboga por el cierre de nucleares cuando vayan cumpliendo su vida útil; si hay extensiones a corto plazo, deberán ser solicitadas y autorizadas. Como mínimo, será a partir de 2025 cuando estas instalaciones irán clausurando. En 2030 solo habrá instalados 3.000 Mw de energía nuclear. Y en 2035, ningún megavatio. En estos momentos hay más de 7.000 Mw.

El Gobierno es consciente del impacto que supondrá este proceso de descarbonización -acelerado a juicio de buena parte de la industria asturiana-, por lo que ha elaborado un Plan de acción urgente para las comarcas de carbón y centrales en cierre 2019-2021, que también beneficiará a los territorios donde se vayan a desmantelar nucleares (Zorita, en Guadalajara, y Garoña, en Burgos). Una estrategia que incluye una partida global de 422 millones de euros repartida en diferentes destinos, con el objetivo de garantizar a los trabajadores que pierdan sus empleos que cuenten con «compensaciones adecuadas».

Una actividad que tratará de mantenerse, a corto plazo, a través de los planes de Restauración de Minas y de Energías Renovables y Eficiencia Energética, principalmente. Asimismo, el Gobierno pretende implantar convenios de transición para crear un nuevo tejido empresarial y evitar así la pérdida de empleo y población al final de proceso, para lo que reservará 130 millones en líneas de ayudas entre 2019 y 2021.

Ampliación de plazo

El plan urgente ideado por el Gobierno de Pedro Sánchez también reserva 134 millones para agilizar la concesión de subvenciones para el impulso económico de las comarcas mineras. Un montante que quedó pendiente de ejecutar dentro del Plan de la Minería del Carbón 2013-2018, que ahora amplía el plazo para el reconocimiento de las ayudas hasta el 31 de diciembre de 2023.

Los 158,4 millones restantes corresponden a la dotación de los planes de Restauración y Energías Renovables y Eficiencia Energética 2019-2023. Así, Ribera plantea la elaboración de un Plan de Apoyo de Energías Renovables y Eficiencia Energética en coordinación con el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) para los territorios destinatarios de la estrategia de acción urgente.

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