El año 2025 ha comenzado con señales claras de que estamos en una nueva etapa del comercio global. En un contexto internacional marcado ... por la incertidumbre económica y las tensiones comerciales, el tejido empresarial de España se enfrenta a grandes retos, aunque también oportunidades, para seguir creciendo y consolidándose a un nivel global.
Las pequeñas y medianas empresas son las más expuestas a este entorno desafiante. Representan el 99,5% del total de compañías con asalariados en España y concentran el 57% del empleo, sosteniendo así el dinamismo de nuestra economía. Sin embargo, cuentan con menos margen de maniobra frente a los cambios al tener menos capacidad para ajustar precios o diversificar destinos. Acompañarlas no es solo una cuestión coyuntural, es garantizar un tejido empresarial sano, capaz de seguir generando empleo y crecimiento en el futuro.
Sectores clave de la economía asturiana como la metalurgia, la agroalimentación o la manufactura se ven afectados por una escalada arancelaria, impulsada por EE UU y agravada por la respuesta de potencias como China. En este contexto, contar con financiación adecuada es una necesidad. Las empresas necesitan un respaldo económico adecuado para revisar sus estrategias, asumir costes logísticos y acceder a nuevos mercados. Pero también necesitan la ayuda de expertos que les acompañen en la toma de sus decisiones y en la planificación de sus estrategias. Los bancos juegan un papel fundamental en este camino.
Existen medidas y subvenciones públicas para apoyar a las pymes, también por parte del Gobierno del Principado, que recientemente ha movilizado 30 millones de euros para paliar el efecto de los aranceles. Sin embargo, algunas voces ya han reclamado que estas medidas sean ágiles e inmediatas para que tengan efecto. En este contexto, la colaboración público-privada resulta fundamental.
El acompañamiento por parte de entidades fuertes y con capacidad de apoyo y experiencia en distintos mercados es fundamental. Valorar opciones en mercados alternativos, entender el impacto de un arancel o establecerse en un destino exige orientación experta. Desde BBVA, estamos redoblando esfuerzos para que ese apoyo sea cada vez mayor y sostenible. En 2024, cerca de 1.500 empresas y pymes asturianas confiaron en nosotros para impulsar su expansión internacional, accediendo a servicios como formación especializada, asesoramiento experto en comercio exterior y soluciones digitales avanzadas.
Además, destinamos cerca de 1.000 millones de euros a financiar proyectos de empresas, pymes y autónomos en Asturias, reforzando nuestro compromiso con el crecimiento del tejido empresarial en el territorio. Contar con el respaldo de un banco fuerte, sólido, internacional pero, a la vez, cercano y que entienda las dificultades por las que atraviesan las empresas es hoy clave para lidiar con el presente y prepararse para el futuro.
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