Isastur se suma a Imasa y Duro y también pide ayuda al Estado
La complicada situación por la que atraviesa el sector ha llevado a la compañía asturiana a solicitar una inyección económica al Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas
Isastur ha solicitado la ayuda del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, creado por el Gobierno hace más de un año para ayudar a compañías que tienen este carácter y que han sufrido duramente la paralización de su negocio a causa de la pandemia. De este modo, la compañía se suma a Imasa y Duro Felguera, que también han reclamado la ayuda de este mecanismo, que gestiona la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). La noticia la ha hecho pública la SEPI, tras informar de que ha abierto el proceso para la contratación de diez asesores independientes, dentro del acuerdo marco establecido para ello, con el fin de analizar operaciones de ayuda financiera temporal a empresas que la han solicitado, en concreto se trata de las compañías Vicinay Marine, Pacadar, eDreams Odigeo, Imasa e Isastur.
Isastur solicita el mínimo que etablece el fondo, 25 millones de euros, según estableció el Consejo de Ministros cuando impulsó esta herramienta, dotada a su vez con 10.000 millones.. La empresa, que ofrece servicios avanzados, de apoyo y desarrollo técnicos desde Asturias a los cinco continentes, cuenta con 600 empleos en el Principado y un millar en las diferentes sedes en España, Europa, África e Iberoamérica. El año pasado facturó 170 millones.
La compañía quiere así salvar un momento complicado, derivado de la pandemia, que tuvo un triple efecto: la paralización de proyectos, la disminución de la contratación y un incremento importante en los costes para cumplir plazos. De hecho, parte de estos sobrecostes están pendientes de reclamaciones a clientes, aunque la compañía entiende que tardarán años en resolverse. Pese a esta situación puntual, la empresa tiene unas expectativas positivas de cara al futuro y la recuperación del sector en todo el mundo. De hecho, su plan estratégico contempla cifras mejores que las del actual.
Otra empresa que ha solicitado el apoyo del fondo es Imasa, aunque su petición ya trascendió en julio. La compañía también ha pedido «la cantidad mínima» que establece el fondo, 25 millones, con el objetivo de lograr su fortalecimiento patrimonial y financiero.
Los asesores jurídicos y financieros contratados ahora por la SEPI forman parte de las firmas más prestigiosas del mercado. A ellos se les asignan mediante los correspondientes contratos los expedientes, bajo la tutela de los responsables del proyecto. El asesoramiento que recibe el fondo asegura, así, un proceso de análisis de las solicitudes de apoyo recibidas exhaustivo, profesional y transparente que garantiza el máximo rigor en la resolución que pone fin a cada expediente.
En el caso de Duro Felguera, se aprobó un apoyo por 120 millones de euros en dos fases. La primera, de 40 millones, ya se ejecutó y se está pendiente de la segunda fase, tras aceptarse dos prórrogas para permitir a la empresa cumplir con las exigencias de la SEPI.
