«Somos el único partido que mira por los trabajadores»

-¿Cuáles son las claves de su programa para Asturias?

-Partimos de la idea de que el 28M nada empieza ni termina para los trabajadores de esta región. En el capitalismo no hay salida para el pueblo. Nosotros creemos que hace falta otro modelo de sociedad, en el que los trabajadores decidan si el fruto de su trabajo se destina a satisfacer las necesidades del conjunto de la población o sirve para enriquecer a una minoría. Hasta entonces apostaremos por la expropiación de vivienda a bancos para crear un parque de vivienda pública, gratuidad del IBI en la primera vivienda y un coste proporcional en segundas residencias así como topar los productos básicos sin que la administración pague la diferencia, Somos el único partido que mira por los trabajadores.

-En materia de empleo, ¿qué medidas llevan?

-Lo primero sería recuperar la gestión pública de hospitales, centros de salud, colegios y administraciones. También apostamos por la nacionalización de todos los monopolios existentes en Asturias porque entendemos que la progresiva privatización de las empresas estratégicas de nuestra región (Arcelor, Alcoa, Santa Bárbara, etc) se ha saldado con la destrucción de miles de puestos de trabajo. Ello ha intensificado exponencialmente la precariedad de los empleados.

-¿Son partidarios de la cooficialidad?

-Por supuesto. Consideramos que el asturiano forma parte del acervo cultural de nuestro pueblo y, por lo tanto, es necesario mantenerlo e impulsar su uso. Entendiéndolo además como la forma en que el pueblo trabajador asturiano se expresaba y se expresa, la posición de clase debe ser la de apoyar su oficialidad.

-¿Cómo solventar el déficit de sanitarios?

-Ese déficit de sanitarios es consecuencia de las precariedad de los profesionales. Mientras las listas de espera se eternizan se anuncia la apertura de un hospital privado en Gijón, la relación entre un hecho y otro es evidente. Por ello, creemos que toca eliminar todos los conciertos sanitarios y apostar por un sistema exclusivamente público que garantice condiciones y salarios dignos.