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Bustamante se sintió como en casa en Luanco. :: FOTOS: DAMIÁN ARIENZA
Bustamante se crece en Luanco

Bustamante se crece en Luanco

El artista entusiasmó a sus fans en un concierto repleto de temas sentimentales al que no faltaron Paula Echevarría y la hija de la pareja, Daniella

P. A. MARÍN ESTRADA

Viernes, 25 de agosto 2017, 13:28

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Asturias es su segunda casa y así lo ha declarado en numerosas ocasiones David Bustamante. Ayer tocaba regresar a ella con las canciones que le acompañan en su gira 'Amor de los dos' y Luanco era el lugar de la cita con sus numerosos fans asturianos. No les defraudó el cántabro en un concierto que atrajo a la villa marinera a cientos de ellos deseosos de escuchar al cantante en su tour más romántico.

El festival Luanco al mar propició este reencuentro de Bustamante con el público del Principado y el Complejo Deportivo Balbín acogía un recital al que no faltaron ni Paula Echevarría ni la hija de la pareja, Daniella - la que se pudo ver bailar muy animada con sus primas-, que ocuparon un lateral en el escenario.

Un millar de personas acudieron a recibir todo el inventario de canciones de amor que traía preparadas Bustamante, que salió puntual con vaqueros negros, deportivas blancas y cazadora de cuero también negra cantando 'Cuánto te amé', en el que algunos quisieron ver un mensaje oculto. Y, ya en medio del primer tema, se arrancó con un «¡Puxa, Asturies!», para seguir luego con 'Me arrepiento' y 'Abrázame muy fuerte' saludar con «¿Qué tal, Luanco?» y lanzar una declaración de intenciones: «Tengo muchos amigos ahí entre el público, aquí en mi casa, a la que vuelvo para que todos lo pasemos bien en este viaje de la máquina del tiempo... Gracias a los que me seguís desde el principio».

Siguieron 'Bésame mucho' y 'Vivir'. Y, en sus letras, seguramente más de un espectador quiso hallar los rescoldos sentimentales de la propia vida del intérprete, tras su distanciamiento de la actriz candasina, que, mientras disfrutaba del recital, colgaba vídeos en Instagram para sus miles de seguidores.

Horas antes de su actuación en el festival, el propio David Bustamante había colgado en las redes sociales un vídeo de la emotiva jornada familiar que pasó en Perlora al lado de su hija, Daniella, y de Paula en una celebración anticipada del octavo cumpleaños de la pequeña. En él se veía al cantante y a la actriz jugando con la niña en el tobogán del parque infantil de un hotel próximo a la casa que la familia tiene en la zona rural de Carreño.

En un tobogán, en este caso de emociones y ritmos cálidos se lanzó el artista cántabro, que, tras dejar a la banda tocando, salió de nuevo para cantar 'Miento', y las gargantas más entusiastas le gritaban «¡Guapo!» porque su público de siempre parecía más interesado en disfrutar de las canciones de su ídolo que de los avatares de su vida personal.

El mismo Bustamante contribuyó a esta cercanía incondicional de sus fans lanzándoles desde las tablas abundantes guiños cómplices (además de una baqueta con la que previamente había tocado) para que cantante, banda y público se vinieran arriba en los momentos más intensos del concierto.

Y, así, recordó y homenajeó a Miguel Gallardo -«donde esté desde Luanco»-, para continuar con 'Hoy tengo ganas de ti', cambios de vestuario (mudó la cazadora negra por una azul), una exhibición de la buena salud de su vozarrón en 'En cuerpo y alma', tiempo para el baile y para verlo arrodillado proclamando que 'Nunca es tarde', el rítmico con 'A contracorriente' y un trago de agua que le dio pie para hablar de la humedad del norte («si lo sabré yo, ¿os dije alguna vez que soy de San Vicente de la Barquera?») y echar un cantarín «Siguiendo la carretera/ hay un pueblo que es de gente marinera».

'Dos hombres y un destino' llevó a su público al éxtasis y él les respondió con un «¡Viva la madre que os parió!», sin poder olvidarse de entonar 'La mitad de nuestro amor', presentar a su banda, dar las gracias a Luanco al mar y a su gente, cantar 'Devuélveme la vida' y, ya casi al final, dedicar 'Completamente libre' «a las tres princesas que me acompañan esta noche mi hija y mis sobrinas». 'Lo pide el alma' y 'El aire que me das' dejó ganas de más, «oé, oé, oés» y varios «¡Puxa, Asturies!».

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