Borrar
La periodista, junto a su hija Alba, en una presentación de 2016.

Ver fotos

La periodista, junto a su hija Alba, en una presentación de 2016. E. P.

La despedida a Mila Ximénez: «Una mujer enérgica, brava, valiente, impulsiva y generosa»

La periodista sevillana muere de cáncer de pulmón a los 69 años

JOAQUINA DUEÑAS

MADRID.

Jueves, 24 de junio 2021, 04:34

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El 16 de junio de 2020, Mila Ximénez (Sevilla, 1952) anunciaba en 'Sálvame' que sufría cáncer de pulmón. Apenas un año después, la colaboradora televisiva no ha podido superar la enfermedad. Falleció ayer en su casa de Madrid acompañada de sus hermanos, su cuñada y su hija Alba, que no se han separado de ella en los últimos días. Rodeada de amor, así se ha ido la sevillana, de 69 años, que durante todo este tiempo ha recibido el apoyo incondicional de sus compañeros y amigos.

Un momento para el que, a pesar de todo, parecía estar ya preparada, tanto que, pudo despedirse personalmente de sus queridos Jorge Javier Vázquez, Belén Esteban, María Patiño o Kiko Hernández. Aunque falleció por la mañana, la noticia se hacía pública en torno a las 13:30 horas y encontraba en directo a sus compañeros de crónica social de 'El programa de Ana Rosa', que con los ojos empañados se despedían de ella al término del espacio.

«Enérgica, fuerte, volcánica, brava, valiente, impulsiva»... empezaban a sonar los calificativos. Ximénez ha sido en los últimos años uno de los pilares del programa 'Sálvame'. «Generosa y entrañable», la describía Joaquín Prat en los primeros instantes mientras que Sonsoles Ónega, conductora de 'Ya es mediodía' arrancaba el suyo con un emotivo recuerdo para la periodista: «Deja un vacío tremendo». Uno de los primeros en manifestarse en sus redes sociales fue su gran amigo Jorge Javier, que publicaba una foto con una sonriente Mila. «El viaje es infinito. Siempre juntos, Mila», escribía.

Ana Rosa Quintana le dedicaba también unas bonitas palabras: «A mí me encantan las mujeres con carácter y con personalidad que se echan la vida a la espalda y tiran para adelante. Lo ha vivido absolutamente todo».

Pablo Alborán también se sumaba a su recuerdo con una imagen con ella sonriendo y mientras recibía un beso de él: «Mila, no dejaré nunca de cantarte. Gracias por tus sonrisas y tus buenas energías. Así te voy a recordar siempre. Un beso enorme a toda la familia». Precisamente era la música del malagueño la elegida por la que fue su casa durante sus últimos 12 años, 'Sálvame', para hacerle un sentido homenaje. Ayer por la tarde no estaba prevista la emisión del programa para dar un especial sobre la Eurocopa. Sin embargo, sus compañeros no podían faltar en una momento tan especial. María Patiño, Lidia Lozano, Alonso Caparrós, Belén Esteban, Belén Rodríguez, Gema Hernández, Rafa Mora y Jesús Manuel, con Jorge Javier al frente, se esforzaban por retener las lágrimas al inicio del espacio, en el que también participaron telefónicamente Eugenia Martínez de Irujo y Lolita Flores, amigas de la periodista. Ambas destacaron su rutilante fuerza y coraje, pero también su tan característica «mala leche». «Ella se bebió la vida», la recordaba la cantante y actriz que lamentaba que «esta es la única batalla que ella ha perdido porque todas las demás las ganó».

Avanzada la tarde llegaba Kiko Hernández que se fundió en un emotivo abrazo con el presentador. Hernández contó que Alba le había transmitido un mensaje de parte de su madre. «Nos va a cuidar desde el cielo y nos hará señales para que sepamos que sigue pendiente de nosotros», contaba, y bromeaba diciendo «que no nos las haga de noche porque nos cagamos». Como la vida misma, la despedida de Mila en la tele estuvo repleta de lágrimas y risas con sus recuerdos.

En la capilla del tanatorio de la M-30 se ofició una misa a cargo del padre Ángel, también amigo suyo. Antes, el sacerdote destacaba que se había ido tranquila y que subrayaba su fuerza y su solidaridad. Una ceremonia a la que asistieron muchos de sus amigos, como Marta López, Carmen Borrego o su madre, María Teresa Campos, muy triste y que apenas pudo articular unas palabras para lamentar que «la vida da golpes terribles». Hoy será incinerada en el cementerio de La Almudena.

Santana y Sacristán

Mila Ximénez tuvo una vida repleta de luces y sombras que nunca trató de ocultar. «Mi vida ha estado marcada por picos muy altos y muy bajos», decía. Y tanto en unos como en otros, una de las principales protagonistas era su hija, Alba Santana, fruto de su relación con el Manolo Santana. «Es la serenidad más absoluta», decía emocionada de ella. «Es el soporte afectivo más importante que tengo», reconocía.

Uno de los peores momentos fue cuando decidió dejar a Alba a vivir con su padre después de su separación. «El padre le iba a dar estabilidad y yo no sabía dónde iba a vivir, no podía llevarla de un lado a otro», confesaba. «Fue el acto más duro y el que hice con más amor», contaba. Y así se lo reconoció públicamente Alba, que además de apoyarla en sus participaciones en concursos como 'Supervivientes', afirmó: «Mi madre me ofreció la mayor prueba de amor: renunció a mí para que yo tuviera un futuro».

Antes de ser comentarista de la crónica social fue protagonista de la misma en los años 80 como miembro de la jet-set marbellí. Aunque en los últimos años la relación con Santana pasaba por uno de sus peores momentos, hubo un tiempo, incluso después de la ruptura, en que no fue así. Tanto que Mila llegaba a asegurar que «viví con Manolo una vida maravillosa». «Ha sido la época más feliz de mi vida». La periodista y el tenista fueron la pareja de moda. Se casaron en 1983 y se instalaron en Marbella, donde vivieron los años dorados de la ciudad. Por entonces ella era conocida como Mila Santana, pero con su separación en 1987 llegaron momentos complicados. Pasó de viajar en jet privado y conocer a los Kennedy a «dormir en un coche» y recuperar su apellido de soltera.

Además de Santana, otros hombres marcaron su vida. Entre ellos, José Sacristán. Los empresarios Antonio Arribas o Rafael Aguilera también la acompañaron durante una parte de su vida. Especialmente Aguilera, con quien siguió en contacto hasta la muerte de él en 2018. Más polémica fue su relación con el controvertido abogado Emilio Rodríguez Menéndez, que años después hacía graves acusaciones públicas sobre ella. También supo dar carpetazo a ese episodio y reponerse con el apoyo de los suyos.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios