La carpa de la sidra se traslada al Náutico

Tres años y tres ubicaciones diferentes. Ese es el balance que presenta la denominada carpa de la sidra, una de las actividades de la Fiesta de la Sidra Natural, que se celebrará en Gijón durante toda la próxima semana. La primera edición se ubicó en la zona de Poniente, muy cerca de la torre de salvamento, para ligarla a la actividad del récord del escanciado que se lleva a cabo en el mismo arenal. Ya en 2014, dado el éxito popular de la iniciativa, los hosteleros, todos ellos vinculados al popular barrio de la sidra de El Llano, decidieron, de común acuerdo con los responsables municipales de festejos, trasladar todo el equipamiento, incluida una nueva carpa, a una zona más amplia, también en Poniente, pero más cercana al Acuario. La iniciativa, por lo que parece, no tuvo la respuesta deseada por parte de la clientela, con un nivel de ventas bastante alejado de lo esperado. La consecuencia es que, para la edición de este año, la tercera en su particular trayectoria, se volverá a cambiar de ubicación y el lugar elegido ha sido el Náutico.

La decisión final se adoptó después de no pocas conversaciones con los empresarios hosteleros implicados que, según señalaron a este periódico, tenían una inicial intención de volver a ubicar la carpa en el mismo lugar del primer año, visto que la cercanía al centro de la ciudad tenía una clara repercusión positiva en las ventas. Eso sí, tenían claro que la opción de ubicarse en el entorno del Acuario quedaba descartada. En un primer momento, para integrar esta actividad dentro de lo que es la Fiesta de la Sidra, se barajó colocarla en El Muelle, en el entorno del muelle de Lequerica, delante del antiguo edificio de la Autoridad Portuaria. Luego, esta posibilidad fue descartada por motivos de seguridad, según se alegó a nivel oficial, a causa de la cercanía de la zona marítima.

¿Dónde ubicarla entonces? Se puso sobre la mesa los jardines del Náutico, una zona del agrado de los empresarios hosteleros, al estar en el centro de la ciudad, con el consiguiente atractivo para los potenciales clientes. Eso sí, la nueva ubicación tiene, al menos, dos inconvenientes. El primero, que la carpa tiene que ser de unas dimensiones bastante más reducidas y, el segundo, que queda un tanto desligada del corazón de la Fiesta de la Sidra Natural, centrado en el Campo Valdés, plaza Mayor y todo el entorno del puerto deportivo.

Muchas bajas

Finalmente, se optó por esta ubicación y, además, se aprovechará la misma infraestructura que será utilizada este próximo fin de semana para la fiesta de la cerveza, y que está íntegramente sufragada por el Ayuntamiento de Gijón. En cuanto que sea menor el tamaño de la carpa, no parece que sea un inconveniente porque, como ayer confirmaron fuentes del barrio de la sidra de El Llano, serán únicamente dos los establecimientos de ese colectivo que estarán presentes en la carpa, en concreto, la Parrilla de Antonio y la sidrería Saúco. El resto de los componentes declinaron la invitación, en buena medida, por lo que parece, por el escaso rendimimiento económico logrado en la edición pasada. Tampoco se abrió la posibilidad de que pudieran participar en esta iniciativa municipal otros establecimientos de la hostelería gijonesa.

A poco más de una semana se ponerse en marcha (se abrirá al jueves de la próxima semana), quedan muchos detalles por concretar entre la sociedad Divertia y los empresarios hosteleros implicados. Sí se sabe que será en el Náutico, pero ¿y el horario? La carpa está ubicada en una zona sensible y los responsables municipales pretenden evitar problemas tanto con los vecinos como con los establecimientos hosteleros del entorno. La pretensión de los promotores es abrir los cuatro días desde el mediodía hasta las tres de la madrugada. El Ayuntamiento quiere minorar ese horario nocturno hasta el entorno de la una de la madrugada. Además, no habrá verbenas como los dos años anteriores, pero sí se pretende autorizar música en directo, del estilo de Arte en la calle, siempre dentro de la misma carpa. El ruido siempre es un problema para estas actividades urbanas nocturnas y, de hecho, el no volver a la ubicación del primer año en Poniente responde, en buena medida, en no castigar de nuevo a los vecinos de esa zona después de un largo verano de festejos en ese entorno concreto. El horario, pues, aún está en el aire.

Sidra, agua y refrescos

Otro elemento de discordia entre el Ayuntamiento y los hosteleros implicados en la carpa de la sidra, es el relativo a la bebida a servir dentro de la misma. Se entiende por parte municipal que en la carpa debería de venderse de forma exclusiva la bebida homenajeada, es decir, la sidra, y, todo lo más, admitir la comercialización de refrescos y agua pensando en el público infantil. El año pasado, por ejemplo, corrió el ribeiro en una de las carpas, y los clientes tomaban lo mismo un gintonic, que un cubalibre o una cerveza, deriva que no fue del agrado de los organizadores del Festival.

Por contra, los hosteleros entienden que ponen a disposición de la clientela todos los palos de sidra, pero que tienen que tener la posibilidad de vender otro tipo de bebidas para quienes lo deseen. Incluso que los turistas pueden querer presenciar en directo el ambiente sidrero, pero sin probar la bebida regional.

Puntos de vista diferentes a cerrar para una edición más de la próxima carpa de la sidra que este año nace, al menos hasta el día de hoy, con dos únicas certezas: que se celebrará en el Náutico y que serán solo dos los hosteleros del barrio de la sidra que participarán en la misma. Los horarios y el contenido aún siguen en el aire.

La Fiesta de la Sidra Natural, la gran cita festiva de la última semana de agosto, congregará como todos los años a miles de personas. Habrá, entre otras muchas actividades, mercadillo, catas, concurso de escanciadores, cancios de chigre y, cómo no, el viernes día 28, el intento de nuevo récord guinnes de escanciado simultáneo. Además, mucha y la mejor sidra.