«La carpa de la sidra no está subvencionada»

«La carpa de la sidra no está subvencionada. El Ayuntamiento no nos da ni una peseta, y es un riesgo que asumimos nosotros, como asociación 'Barrio de la sidra'». De esta forma explicaba ayer Eduardo Juanes, presidente de la citada asociación, alguno de los pormenores económicos de esta actividad vinculada a la Fiesta de la Sidra Natural, que se celebrará en Gijón durante toda la próxima semana. La carpa de la sidra se ubicará este año en el Náutico, después de que en las dos primeras ediciones fuera instalada en dos entornos diferentes de la zona de Poniente.

Eduardo Juanes reconocía que el año pasado el resultado económico no había sido bueno, motivado, en buena medida, por haber estado situada en un entorno excesivamente alejado del centro de la ciudad, en los aledaños del Acuario. Por eso, tenían claro que para la edición de este año había que buscar un nuevo lugar, mucho más cercano al ambiente de toda la fiesta. Se barajó el entorno de El Muelle y, más en concreto, la zona ubicada delante del edificio de la Autoridad Portuaria, pero, por motivos de seguridad, se descartó. Finalmente, su destino será el Náutico, en la misma carpa en la que, desde hoy y hasta el domingo, se celebrará una fiesta dedicada la cerveza.

Molestias inevitables

«Lo que nosotros queremos -señaló Eduardo Juanes-es aportar nuestro grano de arena a la fiesta y recrear una romería de prau en la ciudad, aunque sabemos que eso siempre molesta, pero para la asociación es un importante esfuerzo porque nosotros asumimos todas las posibles pérdidas». El Ayuntamiento, a través de la sociedad Divertia, pone la carpa y se hace cargo de otros gastos, caso de la decoración y la iluminación, que realizará la empresa Germán Vizcaíno, y otras cuestiones de seguridad y tasas.

Pero, con todo, la Asociación 'Barrio de la sidra' de El Llano maneja para la citada carpa, que funcionará la próxima semana desde el jueves hasta el domingo, un presupuesto propio en torno a los 30.000 euros. En el mismo, se incluye un canon de 6.000 euros que la asociación paga a la sociedad Divertia, pero también los gastos de personal, la barra de madera de sesenta metros cuadrados y otros muchos aspectos, que van hasta el detalle de que los camareros trabajen ataviados con algún detalle de la cultura tradicional asturiana.

El riesgo económico es evidente y, por ello, los organizadores tratan de velar porque cuadren las cuentas, labor nada sencilla a base, sólo, de la venta de botellas de sidra. En este sentido, desde la sociedad Divertia aclaran que no se pondrá inconveniente alguno para que puedan vender otro tipo de bebidas «como en cualquier otra sidrería», aunque sí se controlará el horario de cierre. Aunque no está cerrado, es probable que se limite hasta la una y media de la madrugada de jueves a sábado y hasta la medianoche, el domingo, el mismo de esta semana para la fiesta de la cerveza.

Allí habrá comida asturiana, desde sardinas hasta fabada, entre otras cosas. Los chigres representados serán tres: la parrilla Antonio, la sidrería César y la sidrería Saúco, en este momento las únicas que componen, de hecho, la asociación 'Barrio de la sidra' de El Llano.