Actividades multitudinarias de fechas cercanas ya han sido canceladas por la crisis del coronavirus

Poco a poco se caen del calendario las citas festivas del verano gijonés. La última en conocerse fue el Festival Aéreo, que tenía previsto celebrarse el 26 de julio, solo seis días antes de la inauguración de la Feria Internacional de Muestras de Asturias. También está en el aire la noche de los Fuegos, el 14 de agosto, y para la que el Ayuntamiento de Gijón ya busca alternativas. Ante este panorama, numerosos empresarios asturianos con los que ha contactado este periódico, fundamentalmente de pequeñas y medianas empresas, han mostrado su extrañeza porque todavía siga convocada la próxima edición del certamen ferial y dudan de que muchos expositores puedan concurrir a la cita.

Entre tanto, en el Pabellón Central del recinto Luis Adaro está listo un hospital con 144 camas individuales en módulos de doce camas, a la espera de pacientes afectados por el coronavirus. Hay que recordar que este espacio está ocupado durante el certamen, en su mayoría, por empresas de muebles, es decir, manejan grandes volúmenes de mercancía que serían difíciles de reubicar en otros lugares del recinto ferial. Aunque se lograra solventar el problema que supone la existencia de un hospital en el centro del recinto ferial, habría que solucionar la reubicación de estos estands que habitualmente ocupan el Pabellón Central y que, precisamente por eso, son de los que acometen una mayor inversión, ya que esos espacios son de los más cotizados.

Los empresarios permanecen a la espera para ver cómo evoluciona la situación, tanto del certamen como del COVID-19.