Una aglomeración de jóvenes en Somió acaba con tres detenidos y sanciones por botellón
La Policía Local arrestó a tres personas por quemar contenedores y agredir a un agente. La parroquia vive la misma situación cada miércoles
«No se podía ni siquiera pasar con el coche, estaban en mitad de la carretera bebiendo, sin mascarillas, juntos, con la Policía delante y ... sin hacer nada. Todos los miércoles lo mismo y sigue permitiéndose...». Los vecinos de Somió aseguran estar sufriendo «una situación insostenible» después de que, una semana más, la parroquia volviese a ser escenario de una concentración masiva de jóvenes en las inmediaciones de los establecimientos hosteleros de la avenida de Diniosio Cifuentes.
En esa ocasión, la multitud, unas 300 personas, acabó con tres jóvenes detenidos por quemar contenedores y agredir a un agente, a lo que se suma una veintena de sanciones por consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública. Aún con las intervenciones policiales por los altercados, los vecinos piden a las fuerzas de seguridad que eviten la concentración de jóvenes para no tener que llegar al punto de que se produzcan incidentes. «Queremos una prevención y que eviten la concentración masiva de personas sin mascarillas, bebiendo, tirando toda la basura al suelo...», lamentaba ayer Soledad Lafuente, presidenta de la asociación vecinal San Julián, de Somió.
Los altercados y el 'macrobotellón' se vienen repitiendo los miércoles de los meses de julio y agosto. Por ese motivo, anteanoche la Policía Local y la Policía Nacional desplegaron un importante operativo en el entorno de la iglesia de San Julián de Somió y el cruce del 'Peru'. El «control disuasorio», tal como lo denominaron desde la Comisaría de la Policía Nacional, no evitó que a partir de las 22 horas fueran llegando decenas y decenas de jóvenes portando bolsas con bebidas alcohólicas que consumieron en la vía pública. Algunos, los menos, sacaron sus vasos de los bares próximos.
Permanecieron en el lugar, obstaculizando el tráfico, durante más de tres horas. La Policía Nacional explicó que el hecho de no intervenir para disolver la muchedumbre atiende a «razones de seguridad», para evitar enfrentamientos directos con los asistentes. Sí los hubo, sin embargo, bien entrada la madrugada, cuando la muchedumbre regresaba a sus casas.
A las 4.50 horas, la Policía Local detuvo a tres jóvenes acusados de prender fuego a cuatro contenedores que encontraron a su paso en el camino de Los Quiñones, la colonia del Piles, la calle Pérez Pimentel y la calle Ezcurdia. Fue en esta última donde fueron sorprendidos por los agentes. «Llevaban consigo hasta ocho mecheros, alguno de ellos aún caliente en el momento de la detención, y presentaban todos ellos las manos completamente negras», apuntaron desde el área de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Gijón. Se trata de A. H. S. A., A. C. S. y M. A. A., de 18 años y vecinos de Gijón.
El primero de ellos huyó a la carrera y fue perseguido a pie por uno de los policías hasta que pudo ser alcanzado en la confluencia de la calle Suárez Valdés y de la avenida de Pablo Iglesias. «Ofreció resistencia, llegando a dar una patada al torso del agente. Por tanto, también se le investiga por un delito de atentado y resistencia», añade el parte oficial.
Desinfección de Emulsa
La avenida de Dionisio Cifuentes y los alrededores amaneció el jueves llenos de basura, restos de botellón y orines. Una cuadrilla de operarios de Emulsa limpió durante buena parte de la mañana la zona y procedió a desinfectarla. Los vecinos de Somió ya tienen la vista puesta en el próximo miércoles.
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