Dónde disfrutar de un menú de chuletón en Gijón
Los Pomares, El Cuetu, El Pedreru, La Fueya de Tomás y Cabranes abren dieciséis días con la vaca vieja de Trasacar como referente del menú
Se ha convertido en costumbre en Gijón que una vez que se acaban los turrones, los polvorones y las reuniones navideñas, los encuentros en torno a la mesa se celebren por devoción a la carne. La culpa la tienen las Jornadas del Chuletón, que proponen disfrutar de este manjar en cinco sidrerías de la ciudad durante los próximos días.
La actividad, que se presentó en el llagar de Sidra Frutos en presencia del luchador gijonés Joel Álvarez, cumple este año su decimoquinta edición. Le dan forma cinco establecimientos de Gijón: las sidrerías Los Pomares, El Cuetu, El Pedreru, La Fueya de Tomás y Cabranes.
La propuesta gastronómica, común a todos los participantes, comienza con un plato de cecina y una ración de mejillones con un toque particular. Después llega la estrella de las jornadas, el chuletón de vaca vieja, que va guarnicionado con patatas fritas y pimientos. Los chuleteros han sido seleccionados para la ocasión por Cárnicas Trasacar, firma asturiana con más de 35 años de experiencia en el sector. El menú se completa con un postre casero, a criterio del establecimiento y se combina con bodega a elegir por el comensal, que puede escoger entre beber sidra (dos botellas de sidra Frutos por menú) o vino (una jarra por menú). Y todo, a un precio de 75 euros para dos personas.
Las cinco cocinas ya están a pleno rendimiento, pues el programa de estas XV Jornadas del Chuletón comienza a servirse y lo harán durante dieciséis días hasta el viernes 31 de enero de manera ininterrumpida.
En buena compañía
El llagar maliayo donde se dio el pistoletazo de salida de las jornadas acogió también una fiesta en la que se habló de producto y de su correcto servicio. Todo, claro, con la carne y la sidra como protagonistas de excepción, pues por algo Frutos y Trasacar son los compañeros de viaje de una actividad pensada para los amantes de la buena gastronomía.
Javier Trabadelo, gerente de Trasacar, apuntó durante la presentación que los chuleteros que se podrán degustar tienen «entre 25 y 30 días de maduración y las vacas son de raza frisona procedentes de Alemania, Holanda y Dinamarca. La cecina, de igual procedencia, madura durante 12 meses en León.
La sidra con la que se marida destaca por «combinar dulzura y acidez», expuso el responsable del llagar, Gustavo Costales, quien explicó también que es resultado de fruta mayada en 2023 trasegada, en una pequeña parte, con sidra joven.
