«Descansa en paz, director»
Familiares y amigos de la Compañía de Comedias despiden a Eladio Sánchez | «Nos hiciste ver que la vida son momentos y que en las cosas pequeñas está la verdadera felicidad», recuerda su hijo Eladio
EUGENIA GARCÍA
Sábado, 7 de julio 2018, 19:20
La iglesia de San Andrés de Ceares se llenó ayer de flores, música y emoción para despedir a Eladio Sánchez, director de la Compañía Asturiana de Comedias fallecido el jueves, a los 86 años. El funeral de 'Lalo', actor, padre, esposo y amigo, congregó a decenas de personas que quisieron dar el último adiós a «uno de los grandes de la escena costumbrista asturiana».
«Esta parroquia siente un dolor especial al despedirse de un hijo que apreciaba, quería y vivía continuamente la realidad de Ceares», comentó el párroco, José Luis Montero, en una sentida homilía en la que lamentó que «por desgracia, ya me tocó enterrar dos o tres de ese grupo de amigos que se reunían siempre para celebrar su amistad, para recordar sus acontecimientos». Y es que en la memoria de todos los presentes estaban, ayer más que nunca, Arsenio González y Manuel Aller, 'Puloli', ambos actores de la Compañía fallecidos en 2017 y 2016, respectivamente.
Las lágrimas afloraron con los recuerdos de Elena Castro, directora del grupo de teatro Trama, de Granda, quien tomó la palabra para intentar «despedir como se merece» a una figura significativa del teatro asturiano. «A nadie más que a él se le podría aplicar la frase popular de 'lo mamó desde pequeño', pues lo heredó en su nacimiento y desde un primer momento lo cogió con esmero. Y supo conservarlo y mimarlo durante su dilatada vida». Eso sí, siempre –hasta el final– acompañado de su esposa Pili, quien lloraba en primera fila a su compañero de escena y vida. «El tándem perfecto», sobre las tablas y fuera de ellas. Era 'Lalo', prosiguió, «hombre de talante vivo, recto y exigente en su quehacer diario, ordenado y trabajador nato... ¡genio y figura!». Pero no por ello dejaba de tener 'chispa', además de «fuerza y coraje» para no delegar la dirección de la Compañía Asturiana de Comedias hasta los últimos momentos. «Le pedimos que nos infunda esa misma fuerza para seguir adelante. Descansa en paz, director».
Sin apenas tiempo para recuperar la compostura, Armando Felgueroso, compañero de 'Lalo' en la Compañía improvisó desde el corazón un mensaje breve pero contundente: «Queremos seguir por ti, hasta donde nos dejen y más allá». Intentando sobreponerse al llanto y proyectar la voz como el director le había enseñado, la también integrante del grupo Marta Casas agradeció su «gran suerte» al haber conocido y aprendido de Eladio. «Amó el teatro y el teatro le ha correspondido, no hay más que ver cuántos nos hemos reunido para asistir a su última función», refirió, antes de concluir: «Gracias, maestro, director».
«Marchónos el compañeru y el padre de la familia de cómicos que lu teníemos como referente», lamentó Sergio Buelga, en quien el fallecido delegó sus funciones como director. Eladio, rememoró, «yera la voz firme que facía de guía, la mano tendía qu'aguantaba por toos y por too y la presencia constante que resolvía los problemas».
Para los comediantes, 'Lalo' «yera la estrella polar, y alredor d'ella brillábemos los demás, quexándonos, engarrándonos, disfrutándonos y queriéndonos». Con su muerte, «la cultura asturiana y, sobre too, el mundu del teatro, pierden un gran referente», aseguró, antes de reiterar su gratitud hacia su «maestro».
Las últimas palabras, antes de que la gaita despidiera el féretro, fueron las de 'Lalo' hijo. Puestas en boca de María Luisa Argüelles, viuda de Manuel Aller , dejaron constancia de la gran familia que es la Compañía Asturiana de Comedias.
«Me estoy despidiendo no solo de un padre, sino de mi mejor amigo. Detrás de mucho carácter, siempre hubo un hombre alegre y divertido, de verbo fácil, de chistes, canción tradicional y a veces picardiosa. Nos hiciste ver que la vida son momentos, y que en las cosas sencillas –una buena compañía, un vinín cardiosaludable–, está la felicidad».