«Es un fastidio esperar sin saber el tiempo que queda»
Tras dos semanas de 'hackeo', los usuarios de EMTUSA confían en que pronto las marquesinas y aplicaciones vuelvan a mostrar los tiempos
LUCÍA BARRIO
GIJÓN.
Jueves, 5 de mayo 2022, 01:02
Desde hace dos semanas, Elva Vázquez cada día se encuentra con la misma situación. Llega a la parada de autobús y tiene la duda ... de si le merecerá la pena esperar para cogerlo o ir caminando. Desde que se produjo el ataque informático al Ayuntamiento en la madrugada del 19 de abril las pantallas de las marquesinas dejaron de mostrar los tiempos de llegada. Tampoco se pueden consultar en la aplicación de EMTUSA. «Estamos muy descontentos, llevamos muchos días así. Espero que lo arreglen pronto. Llegas a la parada y lo coges a bulto, no sabes si vale la pena esperar o no», relata Elva.
En la misma situación se encuentra estos días la estudiante Eva Álvarez. Ella cada día coge un Alsa para volver de su facultad en Oviedo y desde la estación de Gijón toma luego la línea 12 de EMTUSA para ir a su casa, en Pumarín. «Estos días hay veces que ni espero porque no sé lo que le queda. Si justo llego cuando acaba de pasar y tarda diez minutos o más no me merece la pena porque llego primero andando a casa», relata.
A Miguel Llanos, no poder ver el tiempo que queda para que lleguen los autobuses le parece «una auténtica faena». Sobre todo, si lo utilizas para trabajar o para llegar a un sitio en el que tienes que estar a una hora concreta. «Esto afecta un montón, no sabes a qué hora va a venir ni cuánto va a tardar, si tienes que ir a algún sitio rápido se complica mucho», apunta.
A Javier Argüelles estos días sin tener disponible este servicio le han servido para «valorar algo muy básico». «Parece una bobada, pero yo me doy cuenta que si no sé cuánto le queda al bus casi prefiero no esperarlo», reconoce.
«A ciegas»
María Luisa Fernández no suele utilizar mucho el transporte municipal pero ayer, por un dolor en una rodilla, decidió esperarlo para regresar a su casa. «No se sabe lo que le queda pero si es por lo del 'hackeo' qué le vamos a hacer», apunta. Para Eva Herrero, no ha supuesto un gran inconveniente ya que considera que, «a quien coge el autobús a diario le afecta menos porque controla bien los tiempos de llegada de las líneas».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión