'Favila', el licor gijonés
La fabricación de destilados suponía una industria naciente y de futuro en nuestra ciudad hace ahora un siglo
Lunes, 13 de febrero 2023, 00:17
Por aquel entonces, la legislación aún permitía que José Rodríguez Ponga definiese a su producto como 'cognac'; hoy en día, sin embargo, 'Favila' no ... podría denominarse así. Sustantivos aparte, la cuestión fue que hace un siglo EL COMERCIO presentó a sus lectores un nuevo producto local, consistente en el licor «obtenido de la manzana, de reducida graduación alcohólica, si se le compara con otros de su clase». Llamado a exportarse a América y, por tanto, a ser uno de los representantes de la manzana asturiana, otorgándole a Asturias «el elevadísimo puesto que siempre ocupó nuestra tierra», el licor 'Favila' se fabricaba en Asturias y se vendía, junto a las mermeladas de manzana de la misma marca, en «la lujosa instalación que posee dicho señor», Ponga, «en las calles Fernández Vallín y Padilla».
Y venía a arreglar, además, una injusticia endémica. «El afán inveterado, aunque ya corregido en gran parte, del agricultor asturiano, de vivir pegado a la rutina, sin perfeccionar los cultivos, ha permitido que la manzana de otros países, en los cuales ese fruto es algo exótico, sirviera para la fabricación de apreciadas bebidas alcohólicas y de subproductos gelatinosos y almíbares, a pesar de que esa clase de manzana, base de las citadas industrias en el extranjero, es insípida, poco jugosa e incomparablemente inferior a la de Asturias, decíamos.
Ahora, tras «sólidos estudios y experimentaciones minuciosas» realizadas tanto en Asturias como en América, Rodríguez Ponga se sentía preparado para «abrirse campo en el mercado de la competencia, rivalizar con las mejores marcas, obtener patente de invención por veinte años, y con marca registrada, y que las botellas que contienen ese refinado néctar, así como las fundas, etiquetas y demás elementos de la presentación sean también de producción asturiana». A pesar de todo, el rastro del líquido elemento -que se recomendaba consumir «mezclado en pequeñas dosis con agua de 'seltz'» y podía reemplazar, «hasta con ventaja, al champagne»- se pierde en nuestra hemeroteca tan pronto como un año después. Poco habría de durar.
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