Gijón plantará más de 63.000 árboles en 20 años para luchar contra el cambio climático

El plan, avanzado por EL COMERCIO, recoge propuestas encaminadas a sustituir asfalto por naturaleza, disminuir el consumo de recursos hídricos, reducir la huella de carbono e incrementar la biodiversidad, refleja en esta primera evaluación del período 2023-24, una inversión que supera los 3,1 millones de euros, procedentes del presupuesto municipal y de los fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Se trata de hacer de la ciudad, sobre todo de la zona urbana, de un lugar mucho más respirable, con espacios medioambientales que contribuyan a luchar contra los efectos nocivos del cambio climático.

En este sentido, los autores del plan destacan la importancia de crear corredores ecológicos y de avanzar en la verdificación urbana. En total, se prevé que la ciudad llegue a contar, en el horizonte más ambicioso en el año 2045, con 174 kilómetros de calles arboladas. En este sentido, seis son las líneas estratégicas para lograr un Gijón más respirable, las cuales van van desde incrementar la biodiversidad (creación de nuevos espacios verdes), aumentar la permeabilidad (sustituir pavimentos duros por zonas verdes y el uso de drenajes), generar corredores ambientales, renaturalizar la ciudad e incrementar el arbolado. También se plantea un proceso de participación y justicia social transversal.

Tal y como destacan los técnicos, existen en Gijón distintos barrios y zonas con algo riesgo de inundación y elevada escorrentía sobre los que se pretende actuar con el fin de mejorar la permeabilidad del suelo.

Para estos casos se plantea plantar especies como plátanos y cambiar el pavimento por el sistema 'solución Estocolmo' que consiste en una de las formas más sostenibles de plantación y permeabilización del terreno.

Se propone, asimismo, un vínculo rural-litoral que consiste en la creación de un gran anillo verde de 28 kilómetros que «abrace la zona urbana de Gijón y promueva un enfoque espacial rural alejado del núcleo urbano». Finalmente, se aboga por fortalecer el papel de los puntos que actúan como pulmones verdes en la ciudad y que son los parques de Isabel la Católica, Los Pericones, Viesques, Moreda y El Lauredal.