Gijón limitará a 30 por hora las calles que no tengan dos carriles por sentido

Es la política de la Dirección General de Tráfico. Ese es el argumento que esgrimió ayer el concejal de Movilidad, Aurelio Martín, para justificar la próxima limitación a 30 kilómetros por hora en las calles con un carril por sentido. Así lo determinará la ordenanza municipal de movilidad, que en este aspecto «se limita a seguir la instrucción de la Jefatura de Tráfico», apuntó. Un documento que se encuentra en periodo de enmiendas en la comisión de Movilidad, Medio Ambiente y Seguridad Ciudadana. Hasta hoy, según informó el edil, el equipo de gobierno ha incorporado cerca de 80 propuestas de los partidos de la oposición. No así una de Vox que solicita la eliminación de la ORA en toda la ciudad.

Por ello, tras su más que previsible aprobación en el Pleno de la segunda semana del mes de octubre y su publicación en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA), se abrirá un periodo de información y alegaciones públicas que durará treinta días. Tales alegaciones deberán ser estudiadas y votadas en la comisión para posteriormente volver a someter a votación el documento en el Pleno. Todo este proceso podría alargar la puesta en marcha de la ordenanza desde su aprobación inicial cerca de cinco o seis meses, es decir, hasta la primavera de 2021.

Según la regulación prevista por el gobierno municipal, apenas en medio centenar de calles se podrá circular a los 50 kilómetros por hora que actualmente rigen como límite. Serán principalmente grandes ejes como las avenidas de El Llano, Constitución, Carlos Marx, Juan Carlos I o Gaspar García Laviana. La mayoría reguladas por radares fijos. En ellas tampoco se descarta tomar decisiones futuras para limitar la velocidad de los vehículos. Lo que sí está descartado es aplicar el límite de 30 kilómetros por hora en toda la ciudad. «Al menos de momento», confirmó Aurelio Martín.

A su vez, en vías que dispongan de una plataforma única de calzada y acera -esto es, ambas partes a un mismo nivel como ocurre en calles semipeatonalizadas de la zona centro- la velocidad máxima serán 20 kilómetros por hora. Y para los vehículos que transporten mercancías peligrosas se fijará, en línea con lo que ya viene marcado en el reglamento general de Tráfico, una velocidad máxima de 40 kilómetros por hora en toda la ciudad.

Mientras la reforma del Muro será debatida en el Consejo Social, no así sucederá con los ciclocarriles instalados por toda la ciudad. «Sería desproporcionado someterlo a votación», apuntó ayer el concejal, quien también justificó el ciclocarril a la izquierda en la avenida de la Costa por la importante presencia de autobuses municipales en esa vía. Hasta cinco líneas recorren la avenida a lo largo del día.

Martín lamentó que los ciclocarriles, «algo que existe en todas las ciudades», sean también objeto de polémica. Y fijó su análisis en Oviedo. Cree que en la ciudad vecina han instalado ciclocarriles más polémicos que los de Gijón y «siendo el gobierno de otro sentir político, allí no existen debates sobre su colocación», argumentó el titular de Movilidad.